Cap.20: Felicidad

101 8 0
                                    

Narra Newt

Había decidido dejar que mis sentimientos por Ciara fluyeran. No estaba seguro de lo que sentía, pero me hacía estar bien. Cuando estaba a su lado todo me parecía mucho más bonito.

Decidimos tomarnos nuestros tiempo para ver como evolucionaban nuestros sentimientos. No queríamos precipitarnos, y menos en un lugar así.

Cada rato libre que tenía me lo pasaba con ella. Habíamos cogido la costumbre de estar un ratito del día en el bosque a solas. Necesitábamos estarlo. Seguíamos con la misma amistad que antes, solamente le añadimos un poco de amor.

Estaba haciendo mis tareas en el huerto cuando Minho apareció.

-Newt: ¿Que tal hoy en el laberinto?

-Minho: Bien, no hemos podido encontrar al penitente que mató Thomas, la sección parece no abrir.

-Newt: Bueno, todavía podéis seguir intentándolo.

-Minho: Que optimista te veo...¿hay algo que me esté perdiendo?

Me sonroje ante la pregunta de Minho. Llevaba unos días sospechando de lo mío con Ciara, lo sabia por la forma en la que me nos miraba.

-Newt: Puede ser que haya pasado algo.

Mire a Minho con una sonrisa y vi que el también me sonreía.

-Minho: Os deseo lo mejor del mundo hermano, y sobretodo que seas muy feliz.

No hizo falta que le dijera nada más. Él ya lo sabía todo. Siempre había sentido una conexión especial con él. Sabía cuando me pasaba algo, aunque no le dijera nada. Conocía mis días malos y como hacerme sentir mejor. Se notan todos estos años juntos.

Después del encuentro me fui a ver cómo estaba Alby. Aún no se había recuperado de la picadura. No se podía mover a penas de la cama y no decía ninguna palabra. Me costaba ver a mi amigo así, pero estaba contento de que aún siguiera con nosotros. Cuando terminé, me fui al comedor con los chicos. Estuvimos de charla en la mesa, contándonos cosas del día y riéndonos de las tonterías de Minho. Estábamos todos en un momento feliz y eso se podía notar.

Cuando terminamos decidí acompañar a Ciara a su cabaña. Le di un beso de buenas noches y me dispuse a irme, pero su voz hizo que me girará.

-Ciara: No tengo mucho sueño, ¿podrías quedarte?

-Newt: Claro- le dije con una cálida sonrisa.

Entre con ella en su cabaña y nos sentamos en su cama. Hablamos durante unas horas, hasta que Ciara empezó a quedarse dormida. Cuando me di cuenta ya estaba con los ojos cerrados. Me quedé observándola un rato, se veía tan bonita. Podía sentir cuanto la quería. Le di un beso en la mejilla, la arrope y me fui a mi hamaca.

Salí de allí con una sonrisa y lleno de alegría. Sin duda alguna esta chica era el motivo de mi felicidad.

Sálvame - The Mazze RunnerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora