capitulo 3

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[4 horas después del capítulo anterior]

Veinte salió del castillo, molesto, había estado leyendo los libros de la biblioteca, pero ninguno de los libros a los que tenía acceso explicaba su condición, su magia

Normalmente no iba, pero le apetecía ir, solo tenía que caminar varios kilómetros, pasando un bosque, es lo único que tenía que hacer

Siguió el sendero que atravesaba el bosque, un camino de tierra adornado con piedras rúnicas a cada lado, su mirada se posó tras los arboles del bosque, viendo constantes sombras desplazarse entre la oscuridad del bosque

El transcurso fue tranquilo hasta que veinte, se topó con un hombre con un carro, a un lado, había un rastro rojo carmesí que iba hacia el bosque, veinte se acercó a hablar con el hombre, este se veía claramente preocupado, mirando al bosque

Perdone, ¿qué ha pasado? – pregunta veinte

Tras un suspiro, el hombre empezó a explicar, su caballo se había detenido por alguna razón, trato de que se moviera, pero no hubo manera, luego unas criaturas rompieron la barrera de las runas, el logro escapar, pero su caballo...

Podría conseguir otro, pero costaría demasiado, y su cargamento también desapareció, tras escuchar suficiente, veinte se aventuró al bosque siguiendo el rastro

Si no regreso en dos horas, váyase, yo me ocupare de recuperar su mercancía –

Veinte se internó a la oscuridad del bosque, perdiéndose de vista

{bosque de la noche}

Veinte miro a su alrededor un momento y continúo siguiendo el rastro del suelo

(es extraño, ¿cómo pudieron atravesar la barrera de las runas?, ningún ser de este bosque debería de poder) – piensa veinte mientras camina

Entonces el sonido de unos rápidos pasos sonó, de inmediato se giró y varias flores echas de hielo crecieron de inmediato, atravesando con sus pétalos a una criatura echa de madera, de cuerpo femenino, con hojas en algunas partes de su cuerpo

(sirenas de madera) – piensa veinte viendo como las flores se cerraban, aplastando el cuerpo de la sirena de madera

Mas pasos resonaron, veinte de inmediato se preparó para el combate, varias sirenas de madera atacaron por todos lados, veinte dio un pequeño salto, generando hielo bajo sus pies para seguido crear un tornado de viento que lo elevo hacia el hielo mientras púas de hielo eran movidas por el aire

(puede que yo no use magia sclipse, pero, eso no me detiene, mi magia funciona aquí, la genero de forma pasiva, duele, pero me salva de momentos como estos) –

Las púas de hielo golpean a las sirenas de madera, golpeándolas en el torso o cabeza, derribándolas y provocando que se retiren temporalmente

Veinte aterriza y mira a su alrededor, buscando de nuevo el rastro, avanzando en cuanto volvió a encontrarlo

Veinte continúo corriendo hasta llegar a una zona sin árboles, donde el caballo yacía tirado, veinte se acercó, pues también estaba la mercancía

(¿aquí tirado?, debe ser una trampa, da igual, tomare la mercancía y me largare de aquí) – piensa veinte mientras caminaba hacia los sacos de mercancía, alzando su mano para tomar uno

Al tocar uno de los sacos, una raíz con púas se enrosco alrededor de su cuerpo, inmovilizándolo, de entre los árboles, sirenas de madera salían

(tsk, raíces drenadoras de magia) –

Veinte se concentra y libera de su cuerpo una ráfaga de aire que corta las raíces, toma los sacos de mercancía usando su magia y loas lanza a varios kilómetros de distancia por encima de los árboles, seguido concentra magia en sus pies, congelando el suelo

dimension sclipseWhere stories live. Discover now