Al pie de la escalera

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Mis ojos se abrieron de par en par. Aún me encontraba sobre la cama y el sol aún no asomaba ni el más leve rayo de su luz.
Con el agobio de mi repentino insomnio me levanté con dolorosos esfuerzos de la cama. Últimamente esto suele suceder mucho; tengo un sueño dónde me caigo de unas escaleras tras sufrir un ataque cardíaco, el lugar donde sucede suele cambiar, pero siempre caigo de unas escaleras tras sufrir un infarto y al despertar no puedo volver a dormir.
Me dirigí a la cocina a por un vaso de agua al sentir mi boca reseca. Bajé por las escaleras hasta el recibidor y de allí cruce a la cocina, al llegar la puerta del refrigerador estaba abierta, era raro, pero no me extraño ya que tenía unos cuantos años con ella y si no habían pasado cosas como estas antes era por suerte. Cerré la puerta del refri y tomé el vaso de agua.
El agua paso por mi garganta pesada, no pude tomar más de medio vaso, lo dejé en el fregadero y me dirigí nuevamente a mí recamara para pasar el resto de la pesada umbrosa noche recostado sobre mi cama.
Mientras subía con mis viejas y desgastadas piernas las escaleras en mis oídos oyó rechinar de la vieja madera arriba como si alguien estuviera arriba. Indeciso por no saber si eran las maderas de esa vieja casa o si en realidad había alguien subí más a prisa. La oscuridad de la noche no me dejaba ver nada a mi alrededor, pero aún podía oír claramente los pasos y sabía exactamente de dónde provenían. Avance hasta el final del corredor dónde había una puerta que llevaba a una vieja habitación ahora abandonada.
La puerta estaba abierta, así que dispuse asomarme hacia dentro, pero antes de poder completar esta acción el intruso se paró frente la puerta.
Me paralice al instante y el intruso también pareció quedar impactado al verme ya que ambos nos quedamos parados uno frente al otro. Largos segundos de contemplación, los más largos de mi vida, pero entonces mis ojos se cruzaron con los suyos y eso pareció hacer que el tiempo volviera a andar.
El intruso me tomo de los hombros y me empujó por todo el corredor hasta la pared al lado de la escalera dejándome arrinconado sin darme oportunidad de evitarlo y luego con su mano izquierda saco un cuchillo de su  chaqueta y sin tomarse ni un segundo de espera me atravesó un costado del pecho, la hoja estaba bien afilada así que corto mi carne con suma facilidad, luego saco el cuchillo y volvió a apuñalar otras doce veces mas, pero curiosamente no se mostró sangre alguna en la cuchilla hasta la séptima apuñalada que fue realizada en el medio del pecho.
Tras culminar con su  alfiletero me soltó y dejó caer hacia las escaleras. Di golpes hasta llegar hasta el pie de las escaleras dejando manchas en cada uno de los escalones mientras mi cuerpo caía. Allí sin capacidad de moverme o pedir alguna clase de auxilio, mi agonizante ser solo dejó a sus incisiones supurar sangre formando un mar de carmesí alrededor que al pasar de las horas se volvió un espejo del más raro cristal.

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⏰ Última actualización: Jan 05 ⏰

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