𝑖𝑛𝑐𝑜𝑛𝑑𝑖𝑡𝑖𝑜𝑛𝑛𝑒𝑙 || ✯𝐽𝑒𝑜𝑛 𝐽𝑢𝑛𝑔𝑘𝑜𝑜𝑘✯

☬25☬

Pov's Grace

Con los pocos días que yo estaba en el Palacio, no tuve que esperar mucho para recibir mi primer pago. Me dieron una considerable cantidad de monedas de oro dentro de un bolsillo de tela

- ¿Qué se supone que debo hacer con esto? - pregunté

- tal vez ahorrarlo, o usarlo para vestir con mejores vestidos que estos, así como lo hacen las favoritas del sultán - Charlotte era quien se escuchaba más entusiasmada

- dejen de estar hablando y pónganse a trabajar - llegó un eunuco hasta nosotras y guardamos nuestro dinero rápido - hoy irán a los jardines. Muévanse

Las dos caminamos rápido hasta los jardines, llegamos a una parte donde había una gran mesa con comida. Había soldados, cocineros, eunucos y chicas como nosotras. Nos acercamos a la mesa y nos entregaron unas bandejas de plata con comida. Caminamos al lado de un grupo de chicas hasta llegar a una una gran carpa de color rojo como el vino. De lejos vi a dos hombres sentados, uno estaba de espaldas con el brazo vendado y el segundo hizo que se me bajara la presión. Era el sultán, y tenía su mejilla de color morado por el golpe que le di, además de que su rostro estaba muy inchados. No me arrepentía de haberme defendido, pero eso no quitaba la probabilidad de que él me quisiera muerta. De inmediato me agaché entre unos arbustos y las chicas que iban detrás de mí me miraron extrañadas, además de que me estaban juzgando con la mirada

- ¿Pero qué te sucede? - dijo Charlotte avergonzada

- no, nada, me duele el estómago

- no te creo. Deja de jugar y lleva esa comida

- no puedo, en verdad me duele - comencé a hacer muecas de incomodidad y fingí tener dolor de estómago

- ¿Y qué quieres que haga?

- ¿puedes llevar mi bandeja? Te lo compensaré, y así podrás ver dos veces al sultán y a todos esos hombres apuestos que están ahí ¿Qué te parece?

- me debes una, Evangeline - se fue un poco dudosa de lo que le dije

No podía exponerme ante el sultán, si me reconocían que mataría en ese mismo lugar frente a todas esas personas.

Al poco rato Charlotte regresó y tomó mi bandeja y se fue de nuevo. Yo me quedé en el mismo lugar detrás de los arbustos, mientras que las chicas que pasaban me miraban mal por mi comportamiento, aunque lo único que me interesaba era sobrevivir y no perder mi cabeza

- parece que no quieres ver al sultán - dijo Charlotte cuando regresó - aunque su invitado con el brazo vendado es sexy

- no es eso, en verdad me duele el estómago

- sí claro, y yo nací ayer - rodeó los ojos y cruzó sus brazos - ¿Qué sucede contigo? Eres la persona más extraña y misteriosa que he conocido

- tomaré eso como un halago, Charlotte

- hablo en serio, tu comportamiento da a entender que ocultas algo, y no solamente hablo de que te hayas escondido de alguien en unos arbustos que no terminan de cubrirte ni la espalda. Estás llena de secretos ¿Te escondes del sultán o de quién?

- si eso fuera cierto tendría razones para ocultar algunas cosas. No me escondo de nadie

- ¿Algunas?

- tal vez todo

- algún día te vas a poner el pie tú sola por tantas cosas que ocultas

- gracias por tu consejo

- ¿Por qué están sin hacer nada? Regresen al palacio de inmediato - de nuevo un eunuco llegó hasta nosotras

(...)