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Estaba en el estacionamiento esperando a Liam, Ahora la que espera soy yo ¡Esto es el colmo! Solté un suspiro, mire la hora. 6:40 un minutos más y me largo.
6:41 muy bien me largo, me gire dispuesta a irme.

-alto ahí vaquera. -una mano tomo mi hombro, solté un suspiro de resignación.

Me gire a mirarlo, ¿Cómo puede verse tan bien a las 6 de la mañana? Dios tiene sus favoritos.

-Liam, son las 7 ya. Pensé que no iba a venir. -blanquee los ojos.

-lo siento, es que tuve cierto percance. -tosio levemente.

Cuando lo miro bien, tenía un poco de labial corrido en su labio, sentí mi cuerpo arder del enojo. ¡Me hizo esperarlo una hora mientras el se estaba liando con alguna chica!
Fruncí los labios y pase mi pulgar dónde había restos de labial.

-ya veo cuál fue tu percance. -dije entre dientes. Es un imbécil en todas su expresión.

-no te pongas celosa dulce, mejor vamos porque se me hace tarde.

¡Ja! ¿Celosa yo? Esto si que es el colmo.

-en la vida estaría celosa, es tu vida. Solo que estuve como una idiota esperándote una hora. Mínimo hubiera terminado de desayunar bien. -espeté enojada.

Vamos Pay, respira profundo.

De repente se para en medio camino y se gira.

-¿No desayunaste? -sus ojos me encudriñaban, solté un suspiro.

-si, pero no como suelo desayunar siempre.-me encogí de hombros.

Ya no podía seguir hablando con el, ya llegué a mi límite que no me nace hablar ni escuchar que me hablan.

-oye....-se quedó en silencio, ¿Enserio no recuerda mi nombre?

-Payton.

-si Payton, ¿Quieres comer algo? Antes del entrenamiento. Todavía tenemos veinte minutos.

-no, déjalo así. No tengo mucha hambre, solo has silencio, por favor. -el se miro algo indignado.

Se que soné grosera, pero ¡dios! mi límite de paciencia se acababa. Más adelante cuando se me pase le pediría disculpas.

Llegamos a la cancha de fútbol, habían varios jugadores, cuando llegamos todas las miradas de ellos se posaron en nosotros.

-bien, tu siéntate dónde quieras. Cuando veas que es el descanso me traes mi toalla y mi agua. -asentí lentamente.

Me senté y estuve la mayor parte con mi celular, le mandé un mensaje a mamá preguntando cómo estaban, después ví un rato las redes sociales, me entretuve viendo tik tok.

Hasta que escuche un silbido, levanté la cabeza y parece que era el descanso, lleve la toalla y el agua como me lo pidió. Una vez en frente de él le extendí sus cosas.

-¿No nos vas a presentar a tu novia Carter? -despúes de eso se escucharon risas, me quería ir y esconderme dónde no me encontrarán.

-no. -dicho eso el tomo mi brazo y me llevo a dónde estaba sentada. -quedate aquí luego te daré mi uniforme así me lo dejes lavado para mañana, ¿entendido?

-si..-murmure mirando al piso.

Después de eso me quedé ahí sentada, me perdí unos segundos pensando. Hasta que sentí una presencia a la par mía. Mire y era Jacob.

-¿Puedo preguntar porque eres como el perrito faldero de Liam? -lo que faltaba que me digan perrito faldero del idiota.

-es...una larga historia.

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