Arcane Fanfic: Fallen Angel

Ira Y Rabia

Cuando llegaron a su vivienda, ambos notaron que habían pasado más tiempo del que imaginaron en el recinto, perdieron la noción del tiempo, uno por la adrenalina y otro por el miedo
– Ah.. No se que decir... me volví loco ahí, no debí siquiera de acercarme a ese saco –  Comentó Lewis muy apenado, en un tono melifuo ella exclamó
– Esta bien, no hiciste nada malo, solo te saliste de control, no sabia lo que podría pasar – La chica abrazo a su amigo y este la estrechó aún más, era una sensación que el joven creía extinta hace mucho, al igual que Jinx, la última vez que sintió un abrazo igual de cálido fue cuando Silco la recogió aquella fatídica noche, lentamente se soltaron y pasaron el resto del día juntos, conversando suavemente
Era de noche y la chica ya estaba durmiendo, Lewis salía de su habitación, Silco, su padre lo encontró en el acto
– ¿Y como se la pasaron? – Preguntó
– ¿Quien era su hermana? – Lo enfrentó el muchacho
– Era una mala persona – Respondió cortante el Adulto
– Necesito saber todo de ella, hoy golpee un saco de boxeo y se asustó, necesito saber la verdad para cuidarla debidamente – A pesar de ser solo un joven flaucho se paró firme frente al mayor
– ¡¿QUE HICISTE QUE?! – reclamó Silco
– Lo que escuchó, ahora dígame todo lo que sepa para que no vuelva a pasar – ordenó el chico
– Tenía tu edad, le gustaba pelear, no era precisamente una chica tierna, podía romperte la boca con un solo golpe bien dado, una noche su padre murió, Jinx detonó una bomba por accidente, pensó que no había pasado nada, pero el y sus amigos murieron, su hermana la golpeo y la abandonó, yo la adopte– explicó el hombre
– ¿Como se llama?, ¿Esta viva? – siguió interrogando el joven
– Vi, Violete, ese es su nombre, y esta viva, en una prisión – expresó Silco
– Por daño a propiedad privada, mi hija no debe saber nada de eso, el,a piensa que murió, su hermana debía protegerla, más aún si su padre estaba muerto, pero la golpeo y la dejó a su suerte, le reclamo por no ser perfecta, por ser una maldición – añadió él
– Maldita perra, si la tuviera enfrente la golpearla hasta el cansancio – Lleno de furia al oír las palabras del adulto susurró Lewis
– ¿Te gustaría darle una visita? – Preguntó retante el hombre
– Por supuesto – río sarcásticamente Lewis
Entonces ambos salieron a altas horas de la noche con dirección a la prisión donde estaba la hermana de Jinx, ambos estaban acompañados por varios matones entre ellos la mujer que estaba junto a Silco la primera era vez que Lewis vio a su hija
– Cuando alguien entra a prisión, sobretodo si tuvo algo que ver conmigo, ella comienza a golpearlos, esta loca – dijo él hombre
– Al menos tengo un motivo para golpearla ¿no? – comentó Lewis al soltar una risilla
Cuando llegaron a la prision, Silco sobornó a un guardia para que los dejara pasar, y que no los molestara, al entrar, dos matones de Silco tomaron a la chica, esta intento forcejear, pero era inútil, los hombres eran muy altos y pesados, ella gritaba ¡SUELTENME!, pero la sujetaban más fuerte, cada uno de un brazo, para que el chico la golpeara
– Adelante, haz lo que me dijiste – el hombre le dio unos guantes de cuero a Lewis con semiesferas en los nudillos para golpear más duro, este un poco dudoso se los puso, pero al hacerlo entró a la celda y la vio tenia el cabello rosado, era delgada y un poco más  baja que el, tenía ojos azul claro, se conmovió un poco al ver que era joven como el, tenía mucho por delante, pero luego recordó lo que le había hecho a su querida amiga, se lleno de ira y rabia, apretó el puño y la golpeo en el abdomen, luego con la otra mano le golpeo la mejilla, la volvió a golpear en el abdomen, sitio la vibración de los golpes  en sus puños, alternó entre jabs rápidos y ganchos contundentes, liberando la tensión acumulada, mientras la celda resonaba con el sonido rítmico de sus golpes, al ver que se estaba quedado casi sin fuerzas los matones la soltaron y ella callo al suelo, intento levantarse pero Lewis le pateo el rostro luego la pisó contra contra suelo
– ¿Por que le dejas que lo haga? – Preguntó la mujer que la acompañaba
– Si quieres dominar a alguien, dale pan y circo, ya le di pan, ahora toca el circo – contestó Silco
Lewis la golpeo una y otra vez, como si del saco de boxeo se tratara, salvajemente la pateaba, no había una parte sana en su cuerpo, luego  tomó a la chica del cabello y azotó su cara contra la litera, la levanto y dijo
– Mírame, mírame bien,  cada que recuerdes a tu hermana, me verás a mi, – el golpeo con todas sus fuerzas a Vi en el rostro haciendo que esta vomitara sangre, esta miró a Lewis, se cubrió la cara y con voz entrecortada balbuceo
– ¿Co... conoces a... mi hermana? –
Lewis la pateo en la mandíbula haciendola perdió la conciencia, el chico salió manchado con la sangre de Vi y el hombre preguntó
– ¿Te gustó? –
Jadeando Lewis contestó
– No tiene ni idea–