Capítulo 33

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Bianca Miller

Desperté y lo vi junto a mi plácidamente dormido.

—No quiero volver a verte cerca de mi mujer.

Su mujer, este hombre no me había olvidado a pesar de los años.

Ahora podría entender por qué actuaba así, las flores, sus miradas, como mi cuerpo reaccionaba con sus toques y lo que sentía cuando estaba a su lado, tenemos una historia, un pasado juntos y dos personitas que eran nuestra creación.

Cada vez que lo miraba no podría negar que mi ojitos de cielo era una mini copia de él y ya sé de dónde sacaron mis niños ese lado celoso y positivo, de tal palo tal astilla.

Volví a pensar en el pasado y la culpa me invade en aquel entonces todo había pasado muy rápido y la situación se habían complicado por lo que tomé una decisión en cuanto a mis hijos, debía protegerlos de su abuelo, él era un ser capaz de todo y yo en el estado que me encontraba no podía luchar, además mi confianza en él había disminuido y no sabía si sería el capaz de defendernos de su abuelo, ya que vi como lo manejaba a su antojo al igual que un títere.

Fue una decisión egoísta, lo separé de aquellos pequeños que al igual que yo los esperaba con tantas ansias y no me puedo imaginar todo lo que ha sufrido desde entonces.

Cuando la verdad salga a la luz y él sepa que sus hijos nunca murieron.

¿Serás el capaz de entender por qué lo hice?

¿Me podrá perdonar después de todos estos años?

¿Me odiará?

¿Se los llevará con él para alejándolos de mí?

Tengo miedo de decirle la verdad, pero ya es suficiente el tiempo que ha perdido, él ha cambiado ya no es un peón de su abuelo y es justo que los vea crecer, que sepa de su existencia, que los conozca, que cree ese lazo con ellos el de padre e hijos.

Me prepararé mentalmente para decirle la verdad y a la vez buscaré el momento adecuado, lo que pueda suceder me aterra, temo que sus sentimientos cambien y ese sueño de hace unos días se cumpla.

Estiro mi mano para acariciar su rostro —Nuestros hijos son maravillosos, cuando los conozcas los amaras igual como lo hago yo — lo veo mientras duerme hasta que esos ojos color azul profundo me miran.

Verlo actuar de esta manera me hace reír, él estaba preocupado por mí y mi corazón volvió a latir fuertemente, mi atención va sus manos aún estaban con una coloración roja, debió ser fuerte escuchar a Isaac decir todas esas palabras, no les niego sentí miedo de ver a un amigo que pensé conocer insinuar que pasaría algo más que un beso.

Me sorprendí de que me besara de la nada, pero aun así correspondí a su beso el cual fue tierno y sentía como revivían aquel sentimiento que nunca desapareció, mis labios eran suyos, ¿Lo seguía amando?, si y lo hacía con la misma intensidad, mi corazón y todo mi ser le pertenecieron siempre a él.

Cuando me abrazo antes de que abandonara la habitación me sentía segura y no me quería separar de él, pero tengo dos pequeños a los cuales ir a ver, mi estrellita que hoy era dada de alta.

La puerta se abre rebelando a mi madre quien me dice que el alta esta lista para marcharnos y me puso aún más feliz, pero lo que más me sorprendió fue ver que le daba las gracias por cuidarme a él, acaso anoche ella me vino a ver y conversaron.

Salí de esa habitación con aquella duda ¿De qué hablaron tanto?, pero en estos momentos solo quería ver a mi pequeña, entro a la parte trasera del auto y alguien salto a mis brazos.

Eras todo lo que necesitaba [EN PAUSA]Where stories live. Discover now