La guarda espalda.

Cap.17

Capítulo 17
"Noticias inesperadas"

Dos días habían trascurrido. La tranquilidad rondaba la casa donde se estaban quedando Camila y Lauren.

Narra Lauren.

El reloj marcaba las ocho de la mañana, el desayuno ya lo tenía listo, estaba esperando que Camila despertara.

Me había dado cuenta que en estos días juntas ella dormía más de la cuenta.

Me empezaba a preocupar los mareos que eran más constantes, las náuseas también.

—Buenos días— escuche su voz —Tengo más sueño Lern— se acercó a la mesa —Dormire un poco más—

—Oye, ven aquí cariño— la tome suavemente de la mano —Vamos a comer primero ¿si?—

Frunció el seño —No quiero comer, iré a dormir—

—¿Todo bien?—

—Todo bien, déjame descansar porfavor—

No entendía ni un poco los cambios de humor de Camila.

Ya que me había dejado desayunando sola le llame a mi hermana.

—Hey hermanita guapa, se me había olvidado llamarte—

—Dayana ¿podrías venir? Necesito ayuda—

—Claro ¿Sucede algo? ¿Tienes problemas con Alejandro?—

—Es camila, siento qué está diferente y quisiera que me ayudaras—

—Mm.. dame unas horas para poder terminar mis asuntos y voy a verte—

—Gracias—

Corte la llamada. Desayune sola y pensaba en como animar a Camila, era extraño que tuviese tanto sueño.

Después del desayuno ordene todo, fui a la sala y me recoste en un sofá. No quería admitirlo pero no me gustaba estar en casa ajena, quería mis cosas pero seguro Alejandro intervendria.

Cerré mis ojos un momento. Tenía que idear una forma de ganar dinero, lo que tenía ahorrado me serviría pero aun así necesitaba más ingresos y más aun si quería ofrecerle comodidad a Camila.

Escuche que alguien tocaba la puerta. Me levante y fui a abrirla.

Era la amiga de Camila.

—Hola—

Entro y miró a todos lados. —¿Donde esta Camila?—

—Sigue durmiendo, no a querido desayunar—

Mi miró fijamente —¿esta de mal humor?—

—No sabría describirlo a ciencia cierta, la eh notado cansada, con exceso de sueño—

—Hablaré con ella—

Asenti.
Ellas eran muy buenas amigas, así que no interferiria en su conversación.

Narra Camila.

El cansancio que sentía era demasiado, tal y como había me había dicho Dinah. Sentía más apetito sexual, mareos y mucho sueño.

—Culona— entró a la habitación —Me dijo Lauren que no has comido ¿no tienes apetito?—

—Al menos deberías tocar la puerta— Respondi de mala gana