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Khloe abrazó la almohada bajó su cuerpo. La frazada la cubría hasta la mitad de su rostro y sus ojos estaban fijos en la pequeña radio sobre la mesita de luz.
Apenas había pegado un ojo en toda la noche. Ese día sería la luna llena y eso la tenía como loca. No creía que el alfa fuera a usar su control mental en una noche como esa, dado que estaría ocupado enfocándose en su propio control. Sin embargo, estaba asustada por ella misma, lo que podría hacer o todo lo que podría pasar una vez que la luna se oculte y el alfa comezara a joderle la vida.
Estuvo sumida en sus propios pensamientos y miedos por horas, así que no fue posible ignorar las palabras que salían del tipo en la radio.
"La escuela secundaria de Beacon Hills vuelve a abrir después de cerrar jueves y viernes. La policía busca al supuesto asesino Derek Hale..."
Un suspiro escapó de sus labios al mismo tiempo que Melissa entró rápidamente a la habitación, apagando el radio tan pronto como estuvo cerca.
── Probablemente debería quitar esto ── habló la mujer para si misma.
Khloe no respondió. Su mente no coordinaba mucho en esos momentos, y aún trataba de averiguar como lidiaria con ella una vez que la luna llena pasase.
Había establecido que no podía quedarse ahí cuando fuera completamente una psíquica y una mujer lobo. Sería peligroso porque el alfa fácilmente podía usar su vínculo para hacer que lastime a Scott o Melissa. Incluso debía mantenerse alejada de Stiles... y de todos, en realidad.
No estaba segura de que haría. Scott claramente entendía el problema, pero Melissa era ajena a todo. Probablemente desaparecería sin decir nada, y que sacara las conclusiones que quisiera. Le dolería hacerla preocuparse, pero era lo mejor para mantener seguros a todos.
Ante el silencio su silencio, la mujer se agachó frente a ella en la cama ── ¿Estás viva?
── No ── murmuró la rubia débilmente, sin mirarla a los ojos.
── ¿Estás lista para volver a la escuela?
── No.
── ¿Quieres quedarte en casa un día más?
Algo en su pecho se removió ante esa pregunta. "Casa". No "mi casa". Simplemente "casa".
Melissa había estado tratando de hacerla sentir como si aquel fuera su propio hogar y la amaba por eso. Estaría eternamente agradecida y odiaba la idea de tener que huir de eso solo por una maldición que venía con su apellido.
── No ── contestó finalmente. No quería ir, pero sería mejor tener su cabeza centrada en otra cosa para no volverse demente.
Con una expresión neutral, se sentó en la cama, mirando algún punto en la pared frente a ella. ¿Cuando la vida se había vuelto tan jodida?
