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Permanecía de brazos cruzados mientras veía a su alpha.

. - ¿Esto te parece un problema? - resoplo enojado.

. - Si - le sonrió sin más.

. - ¿Solo por eso me trajiste hasta acá? ¡Dijiste que mi padre se estaba muriendo! - estaba más que enojado.

. - El no, pero yo sí - puso carita de cachorro abandonado, suspiro pesadamente sobando su sien.

. - Si no tenemos sexo no es porque no te ame, estoy ocupado con mi trabajo, ¿Entiendes?

. - No, yo quiero tener sexo todos los días - lo dijo totalmente en serio.

. - Comprendeme que me cuesta mucho soportarte en el sexo, y no es como si lo hiciéramos solo una vez.

. - Pero me gusta estar dentro de ti.

. - Ya basta de eso..no puedo creer que me hayas traído de nuevo a Rusia solo para tener sexo.

Durante los últimos meses no habían estado teniendo sexo como habitualmente, Leewon tenía mucho trabajo y al parecer Caesar no lo comprendía, en las noches siempre era el primero en quedarse dormido, pero la gota que derramó el vaso fue el que se quedara dormido en medio del sexo, el azabache daba gracias que no lo haya tomado a la fuerza como solía hacerlo.

. - Quiero un cachorro - se quedaron en silencio unos segundos.

Sin saber cómo reaccionar se acerco al ruso para luego acariciar sus mejillas, sentía muy sutilmente como su barba comenzaba a crecer.

. - ¿Porque nunca te dejas la barba? - siguió acariciándole el rostro.

. - No quiero parecerme a ese viejo - se refería a su padre - Quiero un cachorro - volvió a repetir.

. - ¡Ya te escuché! - le alzó la voz, suspiro tomándole de la corbata - No me siento listo para eso..no sé si sería buen padre - apoyo sus manos en su pecho.

El Zar le levanto de los muslos haciendo que este le abrazara de la cintura con las piernas.

. - Tampoco estoy preparado para el matrimonio...

En un principio Caesar había dicho que estaban casados pero no era así, se lo había propuesto pero Leewon nunca le dió una respuesta.

. - Yo no se cómo comportarme como un buen esposo o un buen padre - le sostuvo con un brazo para que con el otro apartará sus cabellos del rostro - Pero se que quiero aprender contigo - le dio un beso en la nariz sonrojando al menor.

. - Que cosas dices... - desvió su mirada de la más clara, se sentía avergonzado de lo que decía, nunca había sonado tan dulce.

. - Hablo en serio, estoy intentando ser mejor persona para ti.

. - Dijiste que mi padre se estaba muriendo - le miro de mala forma.

. - Pero también pude haberle hecho algo para que eso fuera verdad - hablaba en serio.

Tenía razón, el ruso había dejado de hacer muchas cosas que le molestaban a Leewon, ahora se comportaba mejor, seguía con sus mentiras y perversidades pero no le hacían daño, le llegaba a parecer lindo y tierno, ya se había acostumbrado al Caesar que resolvía todo a golpes.

. - ¿Tú quieres intentarlo conmigo? - bajo sus manos hasta sus nalgas apretandolas.

. - Si haces eso no podré tomármelo en serio - le sonrió.

Tomo su rostro entre sus manos y le beso con delicadeza, su corazón comenzó a palpitar más rápido que antes, solo aquel omega tenía el poder de ponerlo en esa situación, el beso se fue intensificando haciéndoles respirar pesadamente.

. - Hagamos un cachorro - le susurro en sus labios al separarse unos centímetros de el.

Una sonrisa malísiosa se asomó en su rostro, dio unos pasos hasta llegar a una pared y azotarlo en esta, se comenzó a quitar las capas de ropa que tenía en el cuerpo, Leewon solo le miraba sonrojado, tenía un cuerpo maravilloso aquel alpha.

Le alejo con sus manos para bajar y el poder igual quitarse la ropa, al estar desnudo ni tiempo le dio de irsele encima a su alpha ya que el le ganó, le volteo pegando su rostro en la pared.

. - Se obediente y no te muevas - apretó sus caderas dándole una nalgada.

. - No lo creo posible - alejo sus manos con brusquedad para darse la vuelta y colgarse en su cuello abrazándolo con las piernas.

. - ¿Quieres hacerlo así? Llegará muy profundo - saco su miembro de su pantalón, este era enorme aunque por el tamaño de su cuerpo era ideal.

. - Esa es la idea, que llegue en lo más profundo de mi - susurro en su oído dándole una pequeña mordida a su lóbulo.

Se quitó los guantes con la boca, le metió dos de sus largos y ásperos dedos sacándole un grito.

. - ¡Aaah~! L-lento - le pidió enterrando sus uñas en sus hombros desnudos.

Cómo era de esperarse no le hizo caso y siguió a su ritmo, comenzó a simular tijeras en su interior abriéndolo más, sus dedos estaban empapados de su delicioso lubricante, tanto que empezó a llegar a su antebrazo.

. - S-solo mételo...porfavor~ - atacó sus labios besándolo con necesidad, Caesar le siguió el beso.

Le alzó las caderas para acomodarse en su entrada y metérsela de una embestida.

. - ¡OH MI~! - apretó la mandíbula, sentía tan lleno su interior.

El Zar no espero más y comenzó a moverse con fuerza, sentía como el cuerpo del omega comenzaba a perder fuerza bajo sus manos, sus largas y blancas piernas comenzaban a temblar moviéndose de arriba hacia abajo por las estocadas.

. - Quiero g-gemelos..no trillizos~ - hablaba en un suspiro, tenía el rostro escondido en el cuello de su omega, sus feromonas eran todo para el.

. - ¡C-con..uno ba-basta, aaah~! - sintió como está vez fue más lejos.

. - M-mierda..mngh~ - nunca había escuchado gemir al alpha y le estaba excitando que lo hiciera.

Dio una última estocada haciendo que el azabache se corriera en su abdomen, comenzó a sentir como su interior comenzaba a palpitar y apretar su miembro, su cuerpo comenzó a crispar de lo bien que se sentía.

Como pudo camino hasta el sofá de la sala donde le acostó, tenía sus ojitos llorosos y saliva por la comisura de sus labios, era tan sexy su rostro.

. - Eres tan lascivo - tomo sus piernas colocándolas en su hombro para continuar embestiendolo.

Mientras Caesar abrazaba sus piernas el menor intentaba sostenerse de dónde sea, estaba sacudiendo tanto su cuerpo que la cabeza le empezaba a doler.

. - ¡D-detente! - no le hizo caso, no tenía tanta fuerza en las piernas por lo que intento empujarle con ellas consiguiendolo.

Se levantó como pudo tirando ahora el cuerpo del alpha al sofá y subirsele encima, se autopenetro para comenzar con los sentones.

El Zar tenía una sonrisa excitante en el rostro, ver el pene de su amante robotar con su abdomen era magnífico, le tomo de las caderas para ahora el moverse, lo hacía brusco y con mucha intensidad.

. - ¡Y-ya no aguanto! - araño sus pectorales, estaba a nada de correrse.

La vena de su cuello y brazos se remarcaron por la fuerza que estaba haciendo, estaba en su límite, bastaron unos segundos más para que ambos terminarán juntos y Caesar completará su nudo.

. - ¡Por dios, aaah~! - gimoteo del dolor que sentia en su interior, se sentía tan caliente y lleno.

Caesar apretó sus caderas presionandolo mucho más a su cuerpo, cuando la hinchazón bajo pudo salir de su interior, este desbordaba de su esperma, el menor cayó rendido en su pecho, ya no tenía fuerzas para más.

. - Regresemos a Corea.. - hablo con los últimos suspiros que tenía.

. - Lo que órdenes - le dio un beso en la frente.

Tenía que regresar si o si, la boda de los Joo era muy pronto y Leewon no se la iba a perder por nada en el mundo.

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It's You | Jinx Where stories live. Discover now