23.- Látigo de corazones.

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Fu Yunchuan se detuvo abruptamente mientras sacaba las cajas de embalaje de la bolsa.

Sí, pensó, anoche debe haberlo asustado mucho. Seguramente se preocupó cuando desaparecí de repente.

Al recordar su actitud hacia Er Xiao antes, Fu Yunchuan sintió una rara sensación de culpa, pero pronto fue reemplazada por una extraña sensación de alegría que le hizo levantar la comisura de los labios. "¿Oh? ¿Estaba realmente tan preocupado?"

Cheng Yuan asintió frenéticamente. "Sí, parecía que si no iba a buscarte, me iba a estrangular. ¡Fu-ge, eres asombroso! ¡Hasta puedes entrenar a una serpiente como a un perro!" Le dio a Fu Yunchuan un pulgar hacia arriba.

Fu Yunchuan se sintió un poco orgulloso y aceleró el ritmo, colocando una caja de desayuno tras otra en la mesa.

Al oler la fragancia, Cheng Yuan, que ahora estaba muy familiarizado con Fu Yunchuan, notó que su temperamento había mejorado mucho últimamente y se volvió más atrevido. "Fu-ge, ¿nos has traído algo delicioso otra vez?"

Extendió la mano para tomar una caja, pero Fu Yunchuan lo golpeó en la parte posterior de la mano con los palillos, dejándole una marca roja. Fu Yunchuan no tuvo piedad.

"No te muevas. Todavía no sé si esto será suficiente para Er Xiao. Si quieres comer, bájate y cómpralo tú mismo."

Cheng Yuan murmuró para sí mismo que Fu Yunchuan cambió de humor muy rápido y se preguntó quién había sido el que fue a buscarlo en realidad.

¿No había sido él? ¡Ni siquiera le permitía comer pasteles fritos de aceite, y había traído tantos! ¿Er Xiao podría comerlos todos?

Recordó la escena en la que Er Xiao había comido como si fuera una tormenta devorando todo la última vez. Quizás esta vez también pudiera hacerlo.

Pero si no quieren que coma con ellos, no comerá. Cheng Yuan se frotó la mano y decidió ir él mismo a comprar. ¡Dos yuanes por uno! Compraría diez, comería la mitad y regalaría la otra mitad.

......

Cuando Er Xiao se subió a la mesa, notó que las tapas de las cajas de embalaje ya estaban abiertas. ¿Podría ser que Fu Yunchuan estuviera actuando raro de nuevo?

Pero su estómago estaba vacío y no tenía tiempo para pensar demasiado. Agarró una caja y la devoró.

Fu Yunchuan solo tenía un pedazo de pastel de osmanthus y un tazón de avena en su plato, y vio la serpiente blanca frente a él desaparecer rápidamente toda la comida en su boca. 

Se pasó los dedos por la cara y tosió ligeramente. 

"Esta mañana fui a correr."

Er Xiao asintió apresuradamente en medio del caos, indicando que entendía. No le importaba si Fu Yunchuan se daba cuenta o no; simplemente continuó metiéndose las cajas en la boca.

La expresión de Fu Yunchuan se volvió un poco incómoda y tosió dos veces. "En... en el futuro, te avisaré antes de salir. Si me despierto y todavía estás durmiendo, no quiero despertarte."

Er Xiao se detuvo de repente. Sacó la lengua. Este hombre tan amable no podría ser Fu Yuanchuan, pero el olor era de Fu Yunchuan, no era falso, seguramente estaba encantado de nuevo. 

¿Podría ser...?

 Sus pupilas se contrajeron hasta convertirse en dos líneas finas bajo la luz del sol. Se levantó de repente como un rayo, y con un movimiento rápido como un relámpago, le dio una bofetada a Fu Yunchuan en la cara.

Se convirtió en la serpiente mascota del actorWhere stories live. Discover now