𝟔.

680 70 15
                                    

─°.𓏲⋆ 𝐄𝐅𝐈𝐌𝐄𝐑𝐀𝐒 ‧₊˚⋆ᡣ𐭩
006🔮  la prueba
del dragón.

ㅤㅤ
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ

ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ

ㅤㅤ

ㅤㅤ

ㅤㅤ

ㅤㅤ

ㅤㅤ










˛゚・ε LA PRUEBA DEL DRAGÓN ! *:・゚

˛ღ゚・ε LA PRUEBA DEL DRAGÓN ! ✧ *:・゚

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.



≫ ──── ≪•◦ ✧ ◦•≫ ──── ≪







𝒮entí cómo se me revolvían las tripas en sueños. A tan solo unas horas de la primera prueba, era incapaz de huir de mis miedos incluso estando dormida. Me desperté empapada en sudor a eso de las tres de la mañana y supe al instante que no iba a poder volver a dormirme, así que me levanté.

Hermione había estado muy ocupada ayudando a Harry como para pasar tiempo conmigo, lo cual era justo. Él era era su mejor amigo y yo solo una chica a la cual ayudaba porque se lo había pedido un prófugo de Azkaban. Y él parecía necesitar mucha más ayuda que yo.

Había pasado mucho tiempo en la biblioteca leyendo sobre los cinco dragones que tenían preparados junto a Hermione. Bueno, eso fue los primeros días. En realidad, pasamos casi dos semanas juntas simplemente leyendo y haciendo deberes, con la compañía silenciosa de la otra. Trasladándonos de la biblioteca a su Sala Común cuando Viktor Krum aparecía seguido de sus fanáticas, e incluso cenamos juntas una noche que no podíamos parar de hablar sobre un libro muggle que a ambas nos fascinaba. Fue una cena diferente y linda. Hermione no era tan graciosa como mis amigos, ni tampoco tan dulce como Anthony, pero tenía algo que me encantaba, y todavía estaba intentando descifrar qué era.

Me froté los ojos y caminé en silencio hasta mi escritorio, sobre el cual habían varios pedacitos del delicioso brownie de Mattheo. Siendo iluminada por la tenue luz de mi varita elegí un pedazo pequeño y lo devoré, y detrás de él vinieron dos pequeños pedazos más.

Como si me hubiera tragado una botella de anestesia, sentí la necesidad de zambullirme entre mis sabanas. De repente empecé a fantasear con la comodidad de mi cama, como si fuera un sueño imposible, y cuando por fin salté sobre mi colchón sentí un cosquilleo que me subía por los tobillos y muñecas hasta dejarme atada, inmóvil sobre mi cama.

𝐄𝐅𝐈𝐌𝐄𝐑𝐀𝐒; hermione grangerOnde histórias criam vida. Descubra agora