Siempre supe que sería malo y es que es verdad por qué tú eres tan bueno y no soy como tú
Te has ido hoy y yo te adoro, quisiera saber
¿Que te hace pensar que especial soy?
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-No le tengas miedo -
-Jack ¿Podemos hablar un momento?-
Uno sabe que debe tener miedo cuando la capitana de tu equipo de Quidicht te llama con el tono más dulce e inocente que puedes escuchar, en definitiva Jack estaba en serios problemas y el lo sabía.
-¿Que necesita Venus?- Pregunta el lobo calmado-
-Estoy revisando los sucesos de los accidentes de la escuela y me parece curioso que tú dormitorio es el único que no tuvo accidentes- Comentó Venus tranquila mientras jugaba con los pétalos de una rosa blanca- ¿No sabrás algo no?-
-¿Y-yo?- Jack se puso tenso-
Sabía perfectamente lo que estaba sucediendo había escuchado a los superiores de su dormitorio charlar sobre esto mismo y sinceramente no le gustaba.
-Jack no tienes por qué decirme nada, estás en tu derecho pero si te diré que tengas cuidado, tal vez yo me este equivocado y- No pudo terminar de hablar cuando vio entrar al equipo de Magical Shift del dormitorio Sabanaclaw- ¿Que hacen ellos aquí?-
-Bueno, bueno, bueno pero si está aquí mi herbívora favorita- Leona sonrió burlonamente-
-¿Que hacéis aquí? Este es el campo común de entrenamiento y que yo sepa ustedes tenéis vuestro campo propio de entrenamiento- Venus frunció en ceño y miró con asco a todos los del dormitorio-
-Tu misma lo dijiste, es el campo común de entrenamiento así que tenemos todo el derecho de estar aquí que tú- Miro con territorialidad a la chica-
-Tsk sigan con su entrenamiento nosotros también tenemos un partido que ganar-
El Magical Shift y el Quidicht son deportes que a primera vista son muy diferentes, el Quidicht se juega a grandes alturas al contrario que el Magical Shift el problema inicio cuando cuando sacaron las pelotas de Quidicht al campo.
-¿¡Pero que coño?! ¿¡Que mierda de juego es este?!- Exclamó Leona al ver a varios de sus estudiantes de dormitorio intentando esquivar las bugle-
-Esto no es bueno- Murmuró Venus- ¡Epel cuidado esas bugle están hechizadas!-
Como era de costumbre y gracias a todo lo que Venus le había enseñado, Epel pudo resguardarse de un ataque.
-¡Basta!- Venus petrificó las bugle como buenamente podía y miró a Leona- ¿Fueron ustedes?-
-¿Nosotros? Herbívora ¿En que nos afecta tu jueguito ridículo en el Magical Shift?- Cuestionó Leona- Además ¿Como te atreves a ser tan osada de declararme como culpable eh?-