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002 | Beso 🍎

Otro dia mas en el infierno, Era temprano en la mañana todos dormían cómodamente excepto una persona, el Demonio de la Radio ya estaba despierto desdé hace tiempo, decidió subir hasta el piso mas alto del hotel para dirigirse a su estación de radio la cuál estaba a una distancia considerablemente lejos de la oficina del soberano del infierno, Tan pronto llego a la cima del hotel observado el largo pasillo que habia hasta su estación pudo escuchar un ruido al otro lado, específicamente proveniente de una de las habitaciones finales, suspiro caminado para inspeccionar de que se trataba, después de todo, era el encargado y administrador del Hotel Hazbin

Cuándo habría la puerta su sonrrisa se amplió al ver al ángel caído, revuelto entre papeles no podia creer lo desastroso que era en verdad, se hizo paso entré éstos levantando su mano apunto de hablar cuando fue interrumpido

- No te atrevas! Si dices una sola palabra puedo arrancarte los cuernos - Pronuncio molesto, Lucifer no había dormido en toda la noche seria irónico decir que fue un inferierno leer todo el papeleo atrasado mezclado con los dibujos y proyectos de Charlie en su escritorio

Alastor simplemente suspiro chasqueando sus dedos ordenando los papeles en pilas separadas de cada uno, voltendo la silla de su rey para hacer que quedaran cara a cara

- Su majestad, debería descansar incluso el soberano del infierno tiene que tomar un descanso, mi madre siempre decia... - Fue interrumpido nuevamente, frunciendo el ceño y apretando los dientes en una sonrrisa, Lucifer era un obstinado que no iba a hacerle caso a nadie mucho menos a un pecador conocido como el demonio de la radio

- Necesito que te largues y me dejes terminar mi trabajo - Uso sus poderes para abrir la puerta de su oficina en segundo como una advertencia para que Alastor se fuera de allí y lo dejara solo

El venado solo gruñó, su plan era ganarse la confianza de Lucifer asi como lo hizo con su hija aún que seria mas difícil de lo que el imagino, nuevamente llamo su atención volteando su silla y guardando sus manos detrás de su espalda viendo su ceño fruncido con una sonrisa

- Me temo que me niego a cumplir la orden de un Demonio tan pequeño - Dijo con una sonrisa burlona en su rostro, enserio estaba desafiando al mismísimo Lucifer rey del infierno, fue lo que pensó este mismo al escuchar su atrevimiento, No le importaba si Charlie le preguntará que fue lo que ocurrió con su mano derecha estaba decidido a matar al demonio de la radio

Se levantó en cuestión de segundo, estaba decidido a acabar con Alastor por atreverse a desafiarlo, en cuánto al venado solo mantuvo su sonrrisa intacta al verlo arremangar su camisa blanca hasta sus codos, esperando uno de sus ataques

Y asi fue Lucifer fue el primero en atacar por mas sorprendentemente que fuera no uso sus poderes para no destruir su oficina ni llamar la atención del resto de integrantes del hotel, al ser un espacio reducido era difícil que Alastor pudiera escapar pero si pudo esquivar los golpes con facilidad como si se tratara de un juego

- Vaya incluso ese tal Adán pudo lograr hacerme mas daño que usted - Esa fue la gota que derramó el vaso escuchar eso hizo que lucifer adoptará su forma demoníaca arrastrando a Alastor al piso, Donde este hizo que recobrara la conciencia con un simple beso antes de que lo destruyera a golpe

- Le hace falta mucho autocontrol su alteza - Sonrrio como siempre volviendo a mezclar sus labios en un intercambio de saliva, esa sensación jamás la había experimentado, el sabor de la saliva de un ángel no tenía comparación alguna cosa que lo hizo querer más

- Uhmmm! Apartate! Huh...? - Se quedo sorprendido al ver la expresión del mismísimo demonio de la radio, volvió a su forma normal soltando una pequeña carcajada

Alastor cubrió su boca con su ante brazos estaba sonrrojado, con una mirada perdida y sus orejas de ciervo abajo

- Que pasa mi pequeño cervatillo? No me digas que te gusto probar el fruto prohibido? - Volvió a reír al ver el ceño fruncido de Alastor pero con su sonrisa avergonzada debajo de su mano - Justo como esperaba... - Sonrrio poniendo su mano en la mejilla de Alastor

Su plan no habia salido como el lo esperaba queria que Lucifer estuviera rogando por el, pero en cambio se veia tan débil ante el mismo diablo cosa que le avergonzaba a morir y eso que ya lo estaba

Por su parte Lucifer disfruto de ver a Alastor asi, sumiso y confundido ante el en vez de arrogante y despreciable, podria acostumbrarse de verlo tenerle miedo, después de todo habia sido creado como el mas Hermoso ángel de todos, que tan difícil podria ser...