Capitulo 1

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—¿Tienes todo?

—Si papá.

—¿Estas segura?

—Si.

—"Si señor" —Le corrige.

—Lo siento. Si señor, ya tengo todo.

—Bien, sube al auto, o perderemos el tren, pero antes ve a buscar a tu hermano.

La chica salió del salón en direccion a las escaleras, se detuvo justo donde empezaban, comprobó que su padre estuviera afuera y elevó la voz.

—¡Baja de una vez si estás tan emocionado como dices, o perderemos por tu culpa el tren, no todos sabemos volar en escobas si perdemos el transporte!

—¡Pues poco me importa que no sepas, y ya bajo!

Ella rueda los ojos y se va nuevamente a la sala de los sillones de terciopelo, donde su baúl con sus  cosas ya no estaba.

Se escuchan unos pasos rápidos, la cabellera de su hermano se asoma por la puerta mientras arrastraba su equipaje.

—¿No que teníamos un elfo doméstico? —Se quejaba el chico mientras sudaba por el esfuerzo.

—Si mal no recuerdo, lo liberaron el año pasado.

—Maldito Potter, lo aborrezco.

—Guarda tus maldiciones para cuando lo tengas en frente y usa esa energía pasa subir tus cosas.

—Eres una pesada, por eso no tienes amigos.

La chica se gira lentamente, indiferente e inexpresiva.

—¿Y eso debía ofenderme? Prefiero no tener amigos, a tener a esos dos cerdos con los que andas.

Y sin saber que más responder, se fue arrastrando el baúl, dejándola sola en la habitación mientras la maldecía entre dientes.

Por la cocina, aparece una sirvienta.

—Señorita ___, su túnica ya está planchada.

—Gracias, demela a mi.

—Suerte en su primer día.

Asiente con la cabeza, toma la prenda y ahora sí, sube al transporte donde su hermano y su padre la esperaban.

—¿Estas emocionado Draco?

—Si papá, no sabes las millares de ideas que tengo para este año.

—¿Cuantas ideas te quedan, si quitas todas las que incluyan molestar a Potter o al pelirrojo que lo acompaña?

Su hermano rueda los ojos.

—¿Pelirrojo? ¿Hablas de ese tal Weasley, hijo?

—Si papá, el mismo,

La mueca de zu progenitor cambia a una de desagrado al instante.

—Los Weasley son como una plaga, se multiplican como conejos en madriguera, cada año uno nuevo aparece, no se como no se mueren de hambre.

—Tan pobres como unas ratas, si no fueran magos, serían literalmente basuras. ¿Sabías que el año pasado ingresó otra más? Es una chiquilla tonta que babea por Potter.

El padre ignora el comentario de su hijo.

—Y ese Arthur...

La mayor mira la ventana sin interés en la conversación que sostenían los dos integrantes de la familia, sin embargo su padre lo nota y la saca de sus pensamientos.

Rude|| George Weasley Where stories live. Discover now