Martha Lombardo, la única mujer que sobrevivió al trágico accidente del 72.
Qué tan difícil fue sobrevivir?
Cómo fue su amor en la montaña?
Libro hecho sin el fin de romantizar este trágico accidente, realizado con todo el respeto que se merecen aqu...
-Cuidado Carlos! - gritó la chica argentina segundos antes de que el chico se estacionara tirando un coche de carga con maletas.
-Sos un tarado - agregó Roberto antes de salir.
-La culpa siempre la tengo yo!
-Y sí, el otro día vos fuiste quien dejo la billetera en el restaurante.
-Bah, un error le pasa a cualquiera.
-Si, pero a vos más de uno - finalizó el de rulos
**************************************
Dentro del aereopuerto se encontraban el cuarteto de amigos junto con algunos miembros del equipo, estaban reunidos en un círculo alrededor del capitán de los Old Christians, Marcelo, este estaba pasando lista de todos los que irían al viaje.
-Roberto Canessa! - al momento en el que el chico iba a responder un balón de rugby lo golpeó en el rostro - Roberto Canessa!
-Acá! - respondió divertido para pasarle el balón al siguiente que era mencionado.
Detras suyo, Martu se reía de el, pequeñas risas salían de su boca. Con una sonrisa el chico se giró al percibir su risa, rodeandola en un abrazo para hacerle cosquillas y darle besos por toda la cara, entre risas se separaron no sin antes darse un casto beso.
**************************************
Dentro del avión se percibía el olor a cigarillo y las risas se escuchaban. La emoción del primer viaje para algunos se sentía, la primera vez un avión para muchos.
Martu junto a Carlitos reían, sus asientos estaban en lados opuestos del avión pero eso no impedía que se divirtieran.
Carlitos estaba en los asientos del frente y Martu junto con Roberto en la columna contraría más atras.
Entre risas se empezaron a sentir turbulencias, pero muchos las ignoraron, salvo por Numa Turcatti.
-A ver coquito, mirá a la cámara - dijo Roy tomando una foto de Coco sentado en el posabrazos del asiento de Martu. - listo.
-Pasajeros, habla su capitán, les pedimos que tomen sus asientos y se pongan los cinturones, en unos minutos empezaremos en descenso.
Se escucharon gritos y vitoreós de emoción dentro del avión
-Che, Martu! - gritó Carlitos, entre tanto alboroto era imposible escuchar.
-Qué pasa?
-Y si nos paramos ahí en el teléfono y hablamos?
-Vale sí! Imitemos a los capitanes - propusó la castaña.
-Dale vení, haceté a un lado Alváro - se quejo el chico antes de salir
Roberto con una sonrisa veía a su novia y amigo hacer otra de las muchas locuras que solían hacer.
-Buenas tardes les hablan sus capitanes, el general Carlos Paéz y Martha Lombardo - inició el jovén
Los dos chicos se rieron junto con el resto de los pasajeros
-Dale Martu! - animó Roberto
-Les pedimos que porfavor, abrochen sus cinturones para no desperdigar sus cuerpos por los Andes - añadió la castaña señalando la ventana - y recomienden nuestra aereolínea...
-Caballero, Señorita - un tripulante los calló - porfavor regresen a sus asientos.
Los pasajeros animaron a los jóvenes de enfrente, divertidos por la nueva ocurrencía del par.
-Martu! Carlitos! - coreaban al unísono
-Porfavor sientense - finalizó el tripulante.
Ya todos estaban en sus asientos, felices y emocionados.
-Martu, sabés que te amo? - preguntó Roberto con una sonrisa de embobado
- Lo sé Robe, yo también te amo - respondió la chica con su acento argentino, seguido a un beso.
Las turbulencias hicieron que ambos chicos se separaran, comenzaban a ser más fuertes causando miedo en los demás. De un momento el avión subió y bajo bruscamente haciendo que Gastón y un tripulante chocaran con el techo.
-Linda poneté el cinturón
Gritos asustados y gruñidos se escuchaban, la tranquilidad se había ido. Las maletas comenzarón a caer, el habían había tomado una inclinación haciendo que los pasajeros se aferraran a los asientos.
Martu había comenzado a rezar a la virgen y de poco a poco terminó gritandolo.
Roberto tomó la mano de la chica antes de que el sol deslumbrara a todos dentro del avión, un estruendo se escuchó antes de que un efecto de succión se hiciera dentro del avión.
"Padre nuestro que estás en los cielos...
El avión toca tierra y comienza a descender bruscamente
...Venga a nosotros tu reino, hagase en nosotros tu voluntad.....
Algo hace que el avión se detenga, haciendo que los asientos se acumulen y creen montañas de metal; Dejando a varios pasajeros atrapados, heridos y muertos.
...No nos dejes caer en tentación y libranos del mal, Amén"
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
