Capítulo 09 - ¿Preguntas o sexo?

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Al colocar un pie en el salón de clases, las burlas por parte de ella "Melani Gastrell" fueron la orden del dia y gracias al gran hematoma que ya era visible en su rostro; no se hicieron esperar sus comentarios:

— ¡Que hermosa! — exclamó la princesa — ¿Quién te adornó el rostro así?

— No es de tu incumbencia — soltó en tono de molestia — porque mejor no vas a molestar a otra sí.

Intentando llegar a su lugar sin pasar desapercibida y es que valla, la vida se empecinaba con ella, pero aquella voz chillona la hizo detenerse:

— ¿Quién te crees que eres? — cuestiono — ¿Tú acaso sabes quién es mi padre Boynton?

— ¡Ay! Mira no más — bufo — eres tan ridícula, si piensas que te tengo miedo por eso o soy como los demás idiotas que se inclinan a tus pies — aclaro — ten cuidado bonita porque las chicas como tú, nunca terminan bien.

Después de decir escuchar aquello se alejó, echando humo por los oídos y roja de la ira, camino en dirección a su novio sentándose en sus piernas, hablan mirándola; sin ánimos y ganas de interesarse en ellos dos deja de prestarles atención. Tenía un asunto que resolver y debía ocupar todo su tiempo en eso, en vez de perderlo con los niños de "Papi" a ellos les tenía preparado otra cosa, ahora lo importante es seguir con el plan de su padre y hallarla.

Si había que aclarar algo, era que, no estaba pasando un buen dia, no era el golpe en su rostro, no era por "Melani Gastrell" no era su abuela o su madre; estaba enojada, porque aún tenía a ese policía detrás suyo; si no lograba alejarlo pronto, no podía hacer nada de lo que ya tenía planeado. Debía ser cuidadosa o si no, aquella mujer que hace algunos años atrás le hizo mucho daño, arruinaría todo lo que ha logrado construir.

¿Por qué las cosas debían de ser de esa manera?

¿Por qué en su vida nada puede ser fácil?

Si fuera fácil sería tonto, pero haber guardado aquel secreto hace años, cambiar de identidad y todo para que ella tuviera un poco de paz, una vida normal, mientras nosotras nos hundimos en la miseria ¿Era justo? Viviendo su vida, pagando sus daños solo por su forma de ser cuando era niña, llegando a un límite de ya no querer seguir así, queriendo cambiar esta vida de mierda.

¿Dónde estarás hermanita?

¿Cuántas personas has matado ya? — se preguntó.

Ha tenido que ensuciarse las manos por su culpa, hasta la número dos lo hizo y todo, para que ella se pudiera ir, ahora que necesitan de su ayuda, no la hayan,

¿Es justo para nosotras vivir así? — se cuestionó.

Lo más lamentable es que la muerte de su padre se acerca y ella ni enterada esta, la idea desde un principio era cambiar de identidad por unos cinco años, pero ya van 10 de esos cinco; nunca más respondió los mensajes o llamadas, tampoco a su padre y ahora ella vuelve, para hacerles la vida más miserable y tu viviendo la vida sin preocupaciones. La mañana transcurrió lenta y tortuosa, los minutos se hicieron eternos y la clase de matemáticas era totalmente aburrida; varios de los estudiantes estaban ya dormidos y al maestro poco le importaba con tal de recibir su salario a fin de mes, le daba igual quien prestara atención a su explicación o no; regañarlos y mantenerlos despiertos eran un desperdicio de saliva y tiempo, se podría desquitarse de ellos en los exámenes finales.

Al mismo tiempo que el timbre de salida sonó, se levantó rápido de su asiento, tomando sus cosas para salir de ahí, debía encontrarse con aquel imbécil para arreglar algunas cosas, cobrar algunos favores e idear un plan para librarse de la bruja de su abuela. Camino dando zancadas largas sin importarle que la falda de su uniforme se alzara, le urgía salir de esa horrible cárcel llamada escuela llena de mediocres y falsas amistades que ni para referencia laboral servirían; bajo la atenta mirada de todos se encamino hacia la salida, con lo que no contaba es que la estuvieran esperando.

OBSESION MANICOMIOWhere stories live. Discover now