Hermione Granger y la flor del olvido

Capítulo 1

Mi cara delataba la pequeña impaciencia mezclada con emoción que trataba de ocultar, aún así, lo disimulaba bastante bien. Tenía un presentimiento, algo me decía que este día sería un antes y un después en mi vida, pero, claro, ya estaba casi segura de porque.

Toda mi vida había sido bastante torpe respecto a mis habilidades sociales, lo que me llevó a buscar un reemplazo para las personas: La lectura. (Gracias al cielo por otorgarme el don de poder disfrutar de los libros en vez de criticarlos). A medida que pasaba el tiempo, decidí que debía de aprovecharlo, por lo que cuando se me presentó la oportunidad de publicar mi propia novela, la tomé.

En realidad, no deseo ser escritora, (al menos, no exclusivamente), preferiría un cargo político, pero no hacer nada con esto sería un talento desperdiciado, además, añadir que escribí un libro a mi curriculum no me vendría mal. Quizá uno de no-ficción sea más útil, pero, en este caso, piden uno de fantasía, eso les daré.

Va a haber buena competencia, seguramente la mayoría sea mejor que yo, entonces tenía que esforzarme el doble. Mirando mis opciones, me di cuenta de que debía destacar, y una manera de hacerlo era usando ideas que el resto no tenga. Ahora, ¿dónde podría encontrar esas ideas?... Probablemente buscando inspiración en un lugar que el resto no se atrevería a pisar: El bosque malva.

El bosque malva, conocido por las mil y un historias que tienen de él, quizás se trate del lugar más temido del pueblo en el que vivo. Desde que descubrí su existencia, hace un par de meses, llevo sintiendo fuertes ganas de investigarlo, pero no por sus leyendas o especulaciones, dado que, en mi opinión, todas son mentiras o malos entendidos, lo que llama mi atención son la flora y la fauna del lugar, pero, hasta ahora, el tiempo no me permitía visitarlo.

Di una última revisada a mi bolso, encargándome de que esté todo lo necesario. Tenía que estar preparada, no podía permitirme que me falte algo en el momento adecuado. Podría ser que más que cautelosa esté siendo paranoica, pero nadie estaría junto a mí como para juzgar eso. Repasé mentalmente las cosas que tenía que llevar, viendo si se encontraban o no. Al verificar por décima vez que estaba todo en orden, cerré la puerta de mi cuarto, bajé las escaleras y fui directo hacia el comedor.

― No estaré en casa hoy. ― Avisé en cuanto me senté en la mesa.

Las cosas se dieron tal cual lo imaginé, ninguno de los dos me prestó atención. Lo más cerca que estuvieron de darme una respuesta fue que papá levemente asintió con la cabeza, sin levantar la mirada de su diario.

― Sí, está bien, ¿quieres un té, cariño? ― Me preguntó mamá, quien tampoco le dio mucha importancia a mi declaración.

― Ah, sí, por favor. ― Respondí con poco entusiasmo.

¿No les importaba que su hija no estuviera con ellos? Es decir, si esto no pasara seguido lo tomaría como una exageración de mi parte, pero nunca me dieron la atención necesaria, siempre tuvieron la mente en otras cosas. Solo no podía entender para que se supone que adoptaron a una niña si ni siquiera le darían amor.

El desayuno transcurrió en silencio, no sabría si catalogarlo como tranquilo u incomodo, así que lo voy a dejar en que fue igual a todos los demás. Al terminar, ayudé a mamá a levantar todo y revisé la hora en la televisión: Eran las siete de la mañana. Bien, volvería a las cinco de la tarde entonces. No planeaba abandonar el bosque hasta que lo deje definitivamente para "evitar que se me vaya la inspiración" (en caso de que la encuentre), así que tomé una o dos cosas para comer ahí, aunque tampoco era mucho, soy del tipo de persona que casi nunca tiene hambre.

Salir fue un poco vergonzoso, me había vestido acorde a la situación para ver si estimulaba más a mi imaginación y eso atrajo miradas, aunque fue algo poco adorable que los niños pensaran que era una clase de princesa, incluso si en realidad no parecía una, pero suelen asimilar cualquier vestido no-moderno como un vestido de princesa. Da igual, no duró mucho, el camino hacia el bosque era corto.