t h r e e

433 62 16
                                    

❝SPECIAL AGENT CALLAHAN❞

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

SPECIAL AGENT CALLAHAN

My mother said the cure for thinking too much about yourself was helping somebody who was worse off than you

—Sylvia Plath

—Sylvia Plath

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Hola!

Llegué hasta dónde estaba sirviéndose café la chica pelinegra que trabajaba con nosotros cuyo nombre aún era desconocido para mi, la saludé entusiasmada pero tal parece que mi nuevo don es asustar casi de muerte a los miembros de esta unidad con mi voz usualmente un poco demasiado chillona pues al escucharme detrás de ella dió un salto y tiró parte de su café en el suelo

—Ay no... —me quedé mirando el suelo decepcionada por un par de segundos antes de reaccionar y tirar un montón de toallas de papel donde estaba la mancha para limpiar —. Lo siento tanto...

—Está bien, déjalo —respondió agachándose rápidamente a limpiar pero yo ya había acabado

—Soy Amelia —extendí la mano, ella me analizó de arriba a abajo por un par de segundos y justo cuando creí que no iba a responderme, lo hizo

—Elle —me saludó amablemente con una sonrisa casi imperceptible —¿También estás aplicando para la vacante en la BAU?

—Se supone que estoy aquí como asistente del agente Morgan pero supongo que si... —dije no realmente muy segura

—Vas a necesitar mucho más café entonces

Está vez la sonrisa en su rostro era más grande y genuina mientras rellenaba su vaso del café faltante que la hice tirar y servía uno más para mí el cual agradecí con una enorme sonrisa caminando a su lado hasta llegar a una habitación para analizar el interrogatorio que el señor Hotchner estaba por hacer a la abuelita de Slessman quien habló de un tal Charlie que resultó ser un tal Charles Linder, el compañero de celda de Slessman cuando estuvo en prisión, el que seguramente era su compañero afuera

𝐆𝐨𝐥𝐝𝐞𝐧 𝐇𝐨𝐮𝐫 | Spencer ReidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora