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Pasó una semana desde el partido, cada día hablábamos más con Felipe, el chico de la cancha. Al otro día de clavarle visto me volvió a escribir, pero no nos habíamos vuelto a ver, como mucho nos mandábamos fotos nuestras. Habíamos dicho que la próxima vez que nos veamos sería en otro súper clásico, pero lo suspendían y lo atrasaban por distintos temas, cada vez alejándolo más del presente. Necesitábamos vernos, aunque es lindo hablar con él, corríamos el miedo de aburrirnos del otro. Por esos problemas, hoy nos veíamos, me invitó a merendar a un café en capital.
Se ofreció a pasarme a buscar a las cinco de la tarde. El día transcurrió normal, con nervios, tenía miedo de que pensara que soy muy diferente en persona o que era mucho chat y no le gustaba. Cuando faltaba una hora para las cinco, comencé a prepararme, me metí a bañar, hice mi rutina de siempre y busqué que ponerme. Al estar diez minutos enfrente al placar sin saber que ponerme llamé a mis amigas.
-Necesito ayuda, ya. -Hablé cuando las otras dos contestaron.
-¿Que pasó? -Se adelantó a preguntar Sofía. Por ella estaba en esta situación.
-No sé que ponerme. -Hablé estresada con la toalla todavía puesta.
-¿Para qué? -Preguntó Morena.
-Ah, mal. Vos no sabes, el día que fuimos a la cancha conocí un chabon y bueno. -Le expliqué lo qué pasó con Felipe en la cancha y lo qué pasó en la semana.
-Si te invitó a merendar, ponete algo tranqui. -Sugirió Sofía.
-No amiga, pensaba ponerme un vestido brilloso. -Bromeé.
-Mira, vos tenes un top blanco, ¿no? uno común. -Habló Morena explicando el top con sus manos en la videollamada.
-Te pones ese con el short rosa que tenes. -Le siguió la idea Sofía.
-Mmm, peren que me pruebo. -Busqué en el desorden de mi placar y cuando encontré me saqué la toalla.
-Uf, la suerte que tiene ese chabon. -Habló Morena. -¿es lindo?
Seguí poniéndome la ropa y modele frente a la cámara.
-Hermosa, preciosa, bella. -Me elogió Morena.
-Exactamente eso, ¿qué te pones en los pies? -Preguntó Sofía.
-Las zapatillas negras, esas. -Comenté mientras las buscaba para ponérmelas. Al estar lista fui al baño a terminar de prepararme, me quedaban veinte minutos. -Si, a mi me parece lindo, pero seguro a vos no. -Le contesté la pregunta a mi amiga, teníamos una gran diferencia de gustos y se notaba en los chicos que nos gustaban.
-Con que no sea un tarado, todo bien. -Habló Morena.
Nos quedamos hablando hasta recibir el mensaje de Felipe, "afuera".
-Esta afuera, las dejo. -Me despedí mientras agarraba mis cosas y me ponía perfume.
-Manda foto.
-Pásalo lindo. -Hablaron las dos rápido y les corté para salir de mi departamento. Baje en el ascensor mirándome en todos los espejos y me sonreí con nervios, no es la primera vez que me ve en persona, va a salir todo bien.
