𝐒𝐊𝐘𝐅𝐀𝐋𝐋 - anakin skywalker

01. pilot

SKYFALL
by m4lcey

LA VIDA COMO UNA PRINCESA es muy difícil y más cuando no tienes el apoyo de nadie, especialmente la de tus padres. Nunca tuve una infancia normal, no conozco el exterior, ni a las personas que habitan allá afuera. Desde que nací estoy completamente repleta de lujos y riquezas, algo que no me molesta en lo absoluto.

Solo que odiaba sentirme sola y no ser del agrado de mi padre, nunca tuve una buena relación con él. Apenas y me dirigía la palabra, por otro lado mi madre se mostraba un poco más cariñosa y cada mes iba a mi habitación para saludarme.

Con el tiempo fui acostumbrándome a estar sin ellos, ahora ya no molesta para nada que no me visiten. Algunas veces solo me hablaban para decirme que era un fracaso o porque había hecho algo malo.

Hace mucho tenía una amiga que me apoyaba en todo pero fue asesinada por mi propio padre, claro, él se declaró inocente, pero sé que no es así, ¿la causa de su muerte? Claro, mi amiga quería llevarme al mundo exterior para que lo visitara. No salió bien, un guardia nos descubrió y llevó a Daerys con mi padre.

Mi madre me había dicho muchas veces que él no había sido pero la verdad no le creía en lo absoluto. Daerys había muerto un día después de que ella había sido llevada con el rey.

—Princesa— la voz de mi acompañante, de mi única amiga me hablaba, gire lentamente mi cabeza para mirarla —Sus padres quieren verla— siguió peinando mi cabello.

Sheera llegó después de Daerys, ella era una esclava en Tatooine, mi padre la
compró a un tipo llamado: Watto, todo esto lo conocía ya que había escuchado una conversación que mi padre había tenido con mi madre, hablaban de cómo él la había comprado a un buen precio y sin tener que pagar tanto.

Asco, fue todo lo que sentí ese día.

—¿Mis padres?— pregunté confundida a lo que ella asintió —¿Por qué ellos querrán verme?— Sheera se encogió de hombros.

Mi mente se imaginó alguna plática entre mis padres y yo, claramente no acababa bien. Me levante de la silla girándome hacia mi amiga.

—Esto es tan extraño, nunca piden verme— comencé a caminar por mi habitación tratando de encontrar una respuesta —¿Por qué ahora? ¿Acaso, hice algo malo?

Sheera puso una mano sobre mi hombro —No creo que sea algo malo, ya verás— sonrió enrollando su brazo con el mío —Vamos, no hagamos esperar a tus padres.

Salimos de la habitación saludando al guardia que me cuidaba, es un poco serio y callado, supongo que me cae bien. Mientras caminábamos varias personas a mi alrededor hacían pequeñas reverencias saludándome.