『170 al 172』

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Wan Feng se rió entre los dientes y dijo: "¿Cómo podría no gustarle? ¡Simplemente no se atrevió a admitirlo abiertamente! Mamá, no tienes idea. Ni siquiera me atrevo a mirar a Lingling. Si Min Nan pensara que tengo sentimientos por Lingling, podría venir con un cuchillo en medio de la noche".

Min Nan le dio a Wan Feng una mirada fugaz.

De hecho, ahora estaba considerando agarrar un cuchillo.

Ye Ling salió después de cambiarse de ropa, sintiéndose mucho más a gusto. Cuando vio a Sun Li y los demás charlando, sonriendo y preguntó: "¿De qué estás hablando?".

Sun Li miró a Ye Ling y dijo: "El mes que viene es el Festival del Medio Otoño, y la ciudad organiza un festival de faroles cada año con muchas actividades animadas.

¿Te gustaría unirte a ellos?"

"Claro, nunca antes había participado en un festival de faroles". Ye Ling expresó su interés.

El grupo continuó charlando un rato y afuera ya estaba oscuro. Sol

Li le sugirió a Min Nan: "Deberías acompañar a Lingling de regreso".

Dado lo avanzado de la hora y el clima fresco, los aldeanos se abstuvieron de dar paseos nocturnos como lo hacían durante el verano. La misión de escolta de Min Nan probablemente pasaría desapercibida.

Min Nan se puso de pie y Sun Li le entregó la bolsa de ropa.

Min Nan miró la bolsa. Inicialmente, había planeado esperar la oportunidad de visitar a Ye Ling sin ninguna excusa y luego usar el pretexto de entregarle la ropa. Sin embargo, lo que no esperaba era...

Los dos abrieron la puerta del patio y caminaron por el sendero poco iluminado.

"Tómatelo con calma y ten cuidado con las rocas en el camino", recordó Min Nan, sosteniendo la linterna.

Mientras paseaban, entablaron una conversación informal y el ambiente no era nada incómodo.

En realidad, Min Nan era una persona bien informada con conocimientos que abarcaban astronomía, geografía, literatura y artes. Cuando profundizaron en las discusiones sobre políticas rurales, Min Nan ofreció profundas ideas sobre el panorama político actual.

Sin darse cuenta, cubrieron numerosos temas y el largo viaje pareció transcurrir en un abrir y cerrar de ojos.

Ye Ling observó el bien iluminado edificio de dormitorios para jóvenes educados frente a ella y le advirtió a Min Nan: "Hemos llegado. Hermano mayor Min Nan, deberíamos regresar. Ten cuidado en tu camino".

Min Nan ascendió. "Muy bien, asegúrate de regresar y descansar temprano".

Mientras Ye Ling veía partir a Min Nan, una inesperada sensación de desgana brotó en su corazón. Sorprendida, utilizó rápidamente una sugerencia psicológica para disipar con fuerza ese sentimiento peculiar. Luego, se dio vuelta y entró en el dormitorio juvenil educado.

Cuando sus caminos se cruzaron, Li Han notó que Ye Ling había regresado tarde y una pizca de desdén brilló en sus ojos.

Debido a la tenue iluminación, Ye Ling no captó la expresión de Li Han.

Ye Ling no estaba particularmente familiarizada con los jóvenes educados que residían en el edificio de dormitorios. Podía sentir que algunos de ellos albergaban cierto grado de aversión hacia ella.

Debido a que este grupo particular de personas no era particularmente cálido o amigable con ella, otros dudaban en iniciar amistades con una recién llegada como Ye Ling.

Ya no soy humilde (PAUSADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora