El Veneno (Enzulian) [2]

Capítulo 16: Le Gustó tu Publicación

- Enzo 28 -

Desperté con Olivia arriba mío. Entre sueños escuchaba su voz y al abrir los ojos efectivamente estaba ahí. Valentina del otro de lado de la cama se quejó por el ruido que estaba haciendo Oli.

- Despertate papá, ya es hora de levantarse - Escuché a mi hija, su voz me hizo sonreír.

- Buen día princesa - dije yo y la envolví en un abrazo fuerte - Que hora es? - pregunté mientras miraba mi celular.

el despertador no había sonado, con razón, eran casi las 6 de la mañana. No se que hacía Oli despierta tan temprano.

- Que pasa hija que te levantaste a esta hora? - cuestioné yo mientras me refregaba mis ojos.

- Tuve una pesadilla Pa y no me pude dormir - contestó ella haciendo un puchero. Yo sonreí y le di un beso en la frente - Perdón Papi.

Me senté en la cama con mi hija entre mis piernas y volví a abrazarla. Oli sabía que a su madre no le gustaba que venga a nuestra habitación. Yo solía discutir con Valentina sobre eso todo el tiempo «¿Que tiene de malo eso?» pensé al ver su carita.

- Tenés hambre? Vení hija vamos a desayunar algo rico - dije yo al voltear y ver a Valentina sin reacción.

Suspiré... Estaba cansado de esta situación. Esta mina simplemente dejaba de funcionar y me dejaba solo a cargo de mis hijos. En Londres éramos ella y yo para cuidar a los dos. Intenté convencer a alguno de mis hermanos a que se vengan a Inglaterra, pero ninguno se la fumaba a ella. No quería ser insensible, pero la verdad es que no me importaba que ella esté con depresión, yo le tenía odio. Ella buscó tener esta vida y ahora no quería afrontarla. 

Cargué a Oli hasta la habitación de Benja, cuando fui a verlo el pendejo ya estaba despierto tranquilo con su osito de peluche entre los brazos. Apenas nos vio sonrió.

- Buen día mi amor - Saludé yo con la misma sonrisa, Benja había heredado eso de mi. El niño se puso de pie en su cuna y extendió sus bracitos.

- Papá - soltó Benja. Yo acomodé bien a Oli y levanté a mi hijo también. Fue un poco difícil bajar las escaleras de casa con los dos a cuestas, pero me gustaba hacerlo. En estos momentos solo éramos nosotros tres contra el mundo, yo no tenía mucho tiempo con ellos dos juntos. Para acomodar mis horarios había conseguido cambiar a Olivia a un colegio privado por la mañana. Y a Benja, cuando Valentina estaba ida, lo dejaba en la guardería que tenía el Chelsea para todos sus empleados.

Acomodé a los críos en la cocina, Oli se sentó en la isla y trajo el banquito de Benja. Yo me puse a preparar el desayuno. Mi hija comía lo mismo que yo, a ella le gustaba hacer lo mismo que yo hacía y me seguía en todo, a pesar de su corta edad ella era muy independiente y era responsable con su hermanito.

- Oli, cuidá que Benja no se caiga - Indique yo para darme vuelta y comenzar a cocinar. Miré el reloj y me apuré. Tenía entrenamiento a las  8, estaba bastantes bien de tiempo para hacer el desayuno y dejar a mis hijos, pero mejor si no salía justo. Conseguí esta nueva casa cerca de las instalaciones del club justamente para no sufrir con los horarios.

- Pa, puedo ver la tele? - preguntó ella. Yo me giré a verla, era imposible decirle que no.

Valentina no dejaba que ella vea tele, decía que la iba a hacer tonta y que ella tenía que ser una nena inteligente. Yo miré a mi hija y asentí, ella me sonrió emocionada y tomó el control del plasma.

La pantalla se prendió y estaba justo en el canal de futbol, Olivia tenía mucho interés en el futbol y podía entender ingles, así que ella solía ver los programas conmigo. No tenía problemas con dejar en ese canal, pero escuché que estaban hablando de Julián... La araña era un tema sensible en casa, no solo para mi sino para todos.