Las cosas pasan

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Después de ese día que hable con Santiago y a pesar de que fue duro, acabamos de una forma que yo jamás había pensado, me pasaron muchas cosas negativas que nunca vi un lado bueno, al fin y al cabo siento que acabamos bien, se término de una forma sana pero loca a la vez. 

Nuestra mistad, noviazgo y todo lo bonito había llegado en 2020 y acabo en 2020, un año el cual no cambiaría absolutamente nada, ya que viví cosas muy hermosas, que a pesar que duraron un año, es algo que no se olvida, si sigue intacto en ti.

Siempre digo ¨Nuevo año, nuevas situaciones en la vida¨, bueno no me quejo pero espero esta año encontrarme conmigo misma, saber lo que quiero, obtener logros y por supuesto comenzar bien el colegio. Este año iba para segundo año de bachillerato, lo cual el próximo era mi último año, por ende iba a cambiar muchas cosas en mi vida, pero por ahora mi prioridad era pasar este año, aunque nunca he sido mal alumna, me gusta más superarme y de vez en cuando competir con mis amigas, pero como todavía faltaban semanas pues estaba un poquito relajada, así que tome la desición y consultando con mis papás quería pasar las últimas semanas en casa de mis abuelitos, un pueblito tranquilo, alejada de todos, que en ese momento era lo que mas necesitaba la verdad, no me quería topar con Santiago, ni Alex, peor aún con Rouse, quería un poquito de tranquilidad si es que eso se podía, no quería hacer las cosas apresuradas, o actuar sin pensar, que eso la verdad me jugaba mucho en contra, quería evitar a todos y volver con la cabeza fría, para saber que pasaba con mi vida.

Tanto así que cuando llegué a casa de mis abulitos me desconecte de todo, pordría decir que hasta del mundo, nadie sabía de mi excepto mi mamá, ya que llamaba dos veces al día al convencional, fuera de eso era como que si yo no sabía loque era internet durante las próximas semanas, no niego que al principio era algo raro, ya que en la actualidad somos demasiado viciosos y por eso no sabemos apreciar las cosas que nos da la vida aunque a veces qusiieramos desaparecer, existen cosas que ya tenemos o que nos falta descubrir. 

Pasaban días y días, los cuales fueron aprovechados, ayudaba a mis abuelita cocinando, limpiando, viendo la tienda, yendo de compras, organizando, dandole de comer a sus animalitos y por las noches ver su novela favorita que aunque ni sabía porque capítulo estaba, pues la veía con ella hasta que ya luego le agarre tantito el tino a los capítulos y la verdad es que era muy interesante, mejor aún cuando era novela mexicana, por otro a mi abuelito eran días en los que le acompañaba a la finca, un lugar donde pase varias veces diviertiendo en mi niñez junto a mis primos y volver era sentir tanta nostalgia, pero a la vez divertido ya que en la carretera ibamos poniendo música a full volúmen, mas cuando mi abulito decía que le pusiera Vicente Fernandez, ama mucho sus canciones y a mi me encanta cantarlas con él. 

LLegó un punto en que las últimas dos semanas decidí agarran rumbo para la Sierra, fui donde mi tío y pues las cosas cambiaron un poco, ya que me propuse a que todos los días saldría con él a trabajar sea fuera o al local, es zootecnista, eso incluía ir al campo, conocer nuevos pueblitos, haciendas, ranchos y  viajar una o dos horas, ya que a veces le tocaba salir de la ciudad a sectores que eran muy lejanos, tanto así que llegabamos muy noche a la casa para así al día siguientes volver al trabajo, pero era interesante saber sobre esa carrera, conocer sobre los procesos de vida de cada animalito, su metabolismo, o saber las causas y consecuencias de un embarazo en alguna vaquita, a veces me dejaban ver cirugías o aprender a como suturar, esterilizar o primeros auxilios en algún perrito o gatito, ya que sabía que en algún momento podría llegar a utilizar todo lo que me estaban enseñando.

Fuera de ayudarlo a mi tío y acompañandolo a cualquier cosa, también iba a los cursos de mi prima, cocinaba que con algunos trucos que me dio mi abuelita ya me podía desenvolver sola en la cocina, lo cual eso me emocionaba mucho porque era muy mala, aunque yo digo que me destacaba más en postres, diría por lo que es más fácil pero me gustaba más cocinar dulce que salado.

El penultimo día fuimos de compras, al cine y para acabarlo fuimos a una feria ganadera, que era la primera vez que iba a una, estaba tan emocionada ese día que ya me daba sentimiento regresarme a mi casa, que preguntaba si era normal encariñarme a un lugar donde te tratan tan bien que de una u otra forma ya se siente un lugar seguro, donde puedes ser tu misma y estar libre de comentarios, críticas solo estar rodeada de gente tan linda, que te apoya, escucha, sobretodo es que te entiendan tan rápido, para mi era fantástico y dejar esto si me daba pena cada día, pero ese día si lo disfruté al máximo, cada parada que hicimos, cada momento tomandonos fotos, porque eso si, tome varias fotos a todos los paisajes, son hermosos y cuando es la puesta de sol es aún mejor. 

Pasamos todo el día fuera de casa, que para acabar el día decidimos comprar pizzas y helados, comerlas en casa mientras vemos películas, todos escogimos género sentimental, para esto yo ya presentía que de una u otra forma acabaría llorando y estaba en lo correcto, ver milagros del cielo, me llegó tanto al corazón que hice un segundo océano pacífico en esos momentos, es tan linda, desde ese día me di cuenta que con cualquier película del género que sea terminó llorando.

 - Soy muy sensible - me dije a mi misma.

Al día siguiente en la mañana, me daba sentimiento poco a poco al terminar de hacer la maleta, recoger algunas cositas que todavía no había guardado, despidiendome de todos, ya que solo iba a bajar con mi tío y mi prima, pero antes de salir de la ciudad pasabmos por un lugar el cual siempre ibamos después de llegar del trabajo y era donde vendían frappes, mi favorito era el de oreo con fresa, increíble, aunque siempre decían que mis mezcolanzas eran medias raras pero a mi me encantaban, luego de eso tomamos rumbo hacía la carretera mientras escuchabamos música en este caso de todo un poco pero igual terminabamos cantándolas y lo único que tocaba era esperar treshoras casi cuatro, ya que parabamos mucho sea para poner gasolina, golosinas o ir al baño, lo peor es que cuando llegue ya tenía que viajar directo a mi cas que eran dos horas más de viaje, estaba muy cansado y sabiendo que al día siguiente empazaba clases, aunque no sabía nada sobre eso, ya sentía el cansancio dentro de mi.

Al llegar cambio mis nostalgia al lado de mis abuelitos y me puse a llorar porque no quería volver, pero tocaba hacerlo aunque no quería y fue así como agarramos rumbo a casa, fue cuando volvieron todos esos recuerdos, mi cabeza empiezaba a volver a donde era antes y dejar de evitar situaciones que mientras que en otro lugar no pensaba en eso, pero los recuerdos no los puedo borrar cuando ya pasaron por mi vida.

Cuando llegué a casa y entraba al barrio lo primero que vi fue a ellos dos, Santiago y Alex volvieron hablar, a llevarse y cuando vi que se acerco Rouse donde ellos, fue raro, algo que no imaginaba que podía pasar, principalmente por Santi que aunque me dijo que no le daba buena vibra, por mi no se iba acercar pero es verdad cuando dicen que las personas pueden ser sopresas y esta era una de ellas.

                                

                                          ¨Se que te dolió, pero decir una cosa y luego hacer otra

                                                  ¿cómo se le llama a eso? ¿traición? o ¿hipócrita?¨

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Pensaba que era élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora