Pero no eres mia...

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 Ivette Jimenez

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Ivette Jimenez

DESPUÉS de todo lo que había pasado hace unos minutos, subí las escaleras para ir de nuevo al cuarto. Llegando allí, veo a Matías de reojo. Rápidamente agarro las llaves y con nervios empiezo temblar, intentando encajar las llaves en el cierre. Veo cómo Matías empieza acelerar el paso. Yo con temblores en el cuerpo, por fin meto la llave en la cerradura y rápidamente consigo entrar al cuarto, dando un portazo en la puerta haciendo que Juani se despertara.

—¿Qué hacés? —preguntó algo adormilado—

—Fui a agarrar algo de mi cuarto —mintiendo—

—¿Y por qué volviste si ya estabas en tu cuarto? —preguntó cómo chismoso—

—Porque sino, por la mañana me preguntarán dónde estuve toda la noche —respondí—

—Ah, bue... —pronunció antes de volver a quedarse dormido—

Me adentré un poco más en el cuarto y me fui al mismo sitio donde me quedé dormida, osea, al lado de Fran.

Pipe Otaño

Cuando me fui de ahí, subiendo la escalera, vi a Matías delante mia, a unos metros. Estaba acelerando el paso hacia ¿Ivette?. Qué hacía corriendo hacia ella, después de todo lo que pasó... Pero ahora pienso, él me vio besar a Ivette, pues me alegro mucho de que lo viera, así ve de lo que se arrepintió. Y si no lo vio, pues se lo perdió.

Yendo hacia el cuarto, cuando Matías dejó de acelerar el paso e irse a su cuarto, fui yo al mío, claramente donde estaban Juani, Fran e Ivette. Entré en el cuarto y Ivette ya estaba dormida, en la cama, al lado de Fran. Yo me dormí al lado de Juani.











Al día siguiente, me desperté y estaba en otro lado de la cama, estaba por caerme de ella.

—Ay, amigo —dije internado aguantarme en el filo de ella—

—¿Ya empezamos? —preguntó, algo quejón, Juani por detrás—

—Amigo, que me estoy cayendo de la cama —pronuncié, pero finalmente caí— Ya no hace falta que me ayuden —

—¡Levantáte! —quejó Ivette debajo mía—

—Ay boludo, perdón — dije levantándome rápidamente—

Si Supieras... || Matías RecaltWhere stories live. Discover now