Alenna

Pensamientos y decisiones

Narra Denna

Me abracé a Alex, sintiendo el calor reconfortante de su cuerpo contra el mío. Habíamos hecho esto tantas veces antes, durante nuestros días en la academia cuando no podíamos expresar nuestro amor en público. Era nuestro pequeño ritual cuando estábamos en la habitación, y los besos en la frente nuestra forma de decir "Te quiero" sin palabras cuando estábamos frente a las cámaras. Ahora, con la nuestra hija, ese gesto significaba aún más. Éramos una familia, un equipo, unidos por el amor y la complicidad.

La película se reprodujo en la pantalla, pero mi mente estaba en otra parte. No podía dejar de pensar en la propuesta de Alex, en el miedo que me paralizaba ante la idea de revelar nuestra verdad al mundo. Pero también sabía que no podíamos esconder quiénes éramos por más tiempo. Nuestra hija merecía crecer en un ambiente de amor y autenticidad, sin secretos ni mentiras.

-A: ¿Estás bien?",

Preguntó Alex, notando mi silencio mientras se acomodaba junto a mí.

Asentí, aunque en realidad estaba lejos de estar bien. Mis pensamientos estaban enredados en un torbellino de miedo y duda, pero también en una determinación silenciosa. Teníamos que hacerlo. Teníamos que ser valientes por nuestra hija, por nosotros mismos, por el amor que compartíamos.

Alex acarició mi pelo con ternura, como si pudiera leer mis pensamientos.

-A: ¿Sabes que junto a mí no debes temerle a nada verdad?

Dijo con suavidad, recordándome una vez más que no estábamos solos en esto.

Lo sabía. Siempre lo había sabido. Desde el momento en que estábamos en la academia, Alex había sido mi roca, mi apoyo incondicional. Juntos, éramos más fuertes que cualquier obstáculo que se interpusiera en nuestro camino.

Me aferré a su abrazo, dejando que su calidez me tranquilizara. No importaba lo que el futuro nos deparara, sabía que estábamos juntos en esto. Éramos una familia, unidos por el amor y la determinación de hacer lo correcto.

La película continuó reproduciéndose en la pantalla, pero esta vez, en lugar de prestarle atención, me perdí en mis pensamientos. Imaginé el reencuentro con mis compañeros de la academia, la emoción en el aire cuando por fin se enteraron de la verdad y la alegría de Alex al saber todo y conocer a su pequeña, pero no podía imaginar como reaccionara el mundo cuando rebelemos nuestra historia al mundo. ¿Cómo reaccionarían? ¿Se tomaran bien nuestra relación, o nos juzgarían y condenarían como lo hicieron sin conocer la verdad cuando salimos de la academia?

El miedo seguía presente, pero también había una chispa de esperanza en mi corazón. Por primera vez en mucho tiempo, podíamos ser honestos con nosotros mismos y con los demás. No importaba lo que sucediera después, al menos podríamos vivir nuestras vidas con autenticidad y verdad, sin escondernos del mundo.

-A: ¿Denna?

La voz de Alex me sacó de mis pensamientos, devolviéndome al presente.

Asentí, mirándolo a los ojos con determinación.

-Vamos a hacerlo

Dije con voz firme, sintiendo cómo la certeza se apoderaba de mí.

Una sonrisa se extendió por la cara de Alex, su mirada llena de orgullo y amor.

-A: Estoy contigo en esto, Denna. Siempre juntos.

Nos abrazamos con fuerza, sintiendo la conexión profunda que compartíamos. No importaba lo que el futuro nos deparara, mientras estuviéramos juntos, podríamos enfrentar cualquier desafío que se presentara en nuestro camino.

La noche pasó lentamente, pero esta vez, en lugar de temer el futuro, lo esperábamos con esperanza y valentía. Sabíamos que el camino por delante no sería fácil, pero estábamos listos para enfrentarlo juntos, como una familia unida por el amor y el compromiso.

Finalmente, el sueño nos envolvió en su abrazo cálido, llevándonos hacia un nuevo día lleno de posibilidades y oportunidades, en el que revelaríamos nuestro amor y nuestra familia al mundo.