★彡『 Mɪ Mᴀɢɪᴀ 』彡★

𝐜𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐮𝐧𝐨

𝐜𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐮𝐧𝐨
Palabras vacias...

Desde los primeros meses de T/N viviendo con el hombre, de nombre Koutaro pudo llegar a acostumbrarse a su nuevo hogar, ayudaba en lo que podia en el hogar, Koutaro no dejaba que fuera al pueblo o si no podrian llegar a llevarsela y entregarsela a su padre, así que la mantuvo oculta por su propio bien.

Un día mientras T/N limpiaba la biblioteca encontro un libro morado que cayó por accidente de un estante, cuando lo recogio para dejarlo en su lugar no pudo ocultar su curiosidad y abrirlo para ver lo que tenia en su interior.

Vio letras y dibujos en ellos, como si fueran indicaciones, se sentó en el suelo viendo sus paginas, una por una, llego a una pagina que mostraba un dibujo de un bastón, eso le llamó la atención, pero no pudo deducir lo que significaba, así que cuando se levanto dejo el libro en su lugar cuando vio un hueco al lado del estante, cuando se iba a acercar escucho la puerta abrirse.

—T/N ya llege.—Koutaro entró en la habitación con una bolsa de comestibles que compro en el pueblo.

T/N se alejó rápidamente del lugar y tomo la escoba para simular que estaba barriendo.

—Bienvenido.—respondió mientras alzaba la vista para verlo.

Ese fue uno de los tantos intentos de T/N para ver lo que habia detrás del estante que resultaron sin éxito.
Koutaro también noto que T/N estaba un poco rara cuando entraba en la habitación, entonces cuando recordo que habian pasado doce meses desde que vivia con T/N decidió hacerle un regalo.

—T/N podrías venir un momento?

—Sí.—asintió mientras dejaba la escoba y se dirigia hacia Koutaro.

Koutaro la dirigió hacia la biblioteca mientrás él iba detrás de ella, cuando T/N abrio la puerta lo primero que vio fue un bastón diseñado con un trozo de madera que está decorado con unas cintas de color púrpura. T/N lo vio un poco confundida y luego volteo a ver a Koutaro.

—¿Qué es esto?—preguntó mientras volteaba a ver de nuevo el bastón.

—Un bastón de magia, sabes T/N? Yo era aprendíz de mago cuando era joven, pero renuncie.—dijo mientras ponia sus manos detrás de su espalda.

—¿Por qué renuncio? No le gustaba la magia?

—Me encantaba la magia, pero el esfuerzo que ponia en eso me quitaba tiempo para otras actividades, T/N, me gustaria que tú tuvieras mi bastón y mi libro, cuando muera conviertete en una maga.—dijo mientras le daba palmaditas a T/N en el cabello.

—Tú me ayudaras, verdad? Viajaremos juntos para tener más hechizos juntos, verdad, Koutaro?—T/N se acerco corriendo al bastón mientrás lo tomaba en sus manos.

Sus ojos brillaban mientras lo veia y luego veia a Koutaro sonriendo.

—¡Claro que viajaremos cuando sepas hechizos!—se rió mientras se rascaba la nuca—. Aún tengo algo más que quiero darte...

Koutaro busco algo en su bolsillo y cuando lo encontro sacó un broche de mariposa y se lo entrego a T/N.

—Te quedara bien, así no tendras el cabello en la cara.—le hizo señas a T/N para que se diera vuelta, T/N le dio la espalda y él le puso el broche en el pelo.

—Gracias por todo esto, Koutaro.—T/N murmuró. Aunque Koutaro no lo noto T/N estaba al borde de llorar, puede que sea la primera vez en mucho tiempo que alguién se preocupaba por ella así...

Despúes de eso Koutaro entreno a T/N en el arte de la magia y la hacia leer libros, también le habia dado su libro de hechizos que T/N vio en el estante.

Pero cuando T/N no veia Koutaro se debilitaba cada vez más mientras pasaba el tiempo, primero comenzaron los mareos y los desmayos constantes.
Luego toció sangre, también estaba la fatiga y los dolores de cabeza.

Pero siempre le mentia a T/N diciendole que la primavera y el polén hacia eso, ya que T/N no sabia nada de eso hizo caso a las palabras de su mentor.

Ella se esforzo en todo los hechizos que Koutaro le ponia, día a día T/N hizo lo mismo durante seis años, cuando T/N cumplió quince años se sentía preparada para viajar con Koutaro, pero parecia que viajar no estaba en los planes de Koutaro...

—No llores T/N, tarde o temprano pasaria esto.—Koutaro dijo con aquella sonrisa que siempre le ponia a T/N mientras tocia en la cama.

—Pero... dijiste que viajariamos juntos, esas palabras no eran palabras vacias, verdad?—T/N murmuró mientras se ahogaba en sus propias lágrimas, mientras tomaba la mano de Koutaro entre las suyas.

—Claro que no eran palabras vacias, T/N, comienza tu viaje, yo estare bien.—Koutaro susurrante dijo mientras tocia de nuevo, la sangre en su palma dejo a T/N desconcertada y preocupada.

—No estás bien, cierto?—murmuró mientras se limpiaba las lágrimas de sus mejillas.

El silencio de Koutaro dejo el claro "sí" que T/N no queria escuchar, por lo que sus lágrimas crecieron otra vez.

—Pero es primavera, la primavera es la mejor epoca del año, por favor Koutaro, no me dejes sola...—T/N murmuró apretando la mano de Koutaro.

—Podrías traerme un poco de agua, por favor? Estoy bien, lo juró, creo que probe una planta venenosa, pero ya sabes, nada puede matarme.—Koutaro rió, T/N asintió y fue a la cocina a buscar un vaso de agua.

Cuando volvio a la habitación el vaso que tenia en las manos cayó al suelo mientrás T/N caminaba hasta quedar al lado de la cama y murmuro...

—Mentiroso...—Murmuro viendo a Koutaro con los ojos cerrados, luego vio a la ventana y vio a dos pájaros, mientrás uno tomaba vuelo el otro se quedo parado.

Dos días despúes de eso T/N decidio enterrar a Koutaro, para darle un entierro adecuado.

—Hasta nunca, papá.—murmuró mientras dejaba cuidadosamente flores blancas encima de la tumba de Koutaro.

Se quedo parada unos minutos frente a la tumba para luego ir a la cabaña, praparo una maleta con su ropa y se puso el accesorio de mariposa que Koutaro le regalo, solto un suspiro largo.

Tomo su bastón y decidió emprender el viaje, cuando salió de la cabaña dió un par de pasos. Dio una última mirada a la cabaña dónde Koutaro la crío desde los nueve años, asi que decirle adiós al único lugar que podia considerar un hogar era difícil.

Comenzó a emprender el viaje, cuando iba vio de nuevo dos pájaros, pero ahora los dos volaron juntos, pero cuando tomaron vuelo juntos por el mismo camino hacia enfrente como T/N uno siguio su camino recto y otro se separo y se devolvio hacia atrás y tomo otro camino separandose del otro pájaro.

—No te voy a defraudar.—T/N murmuró para si misma mientras comenzaba su viaje por Britania.