cap 4

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Atenea comenzó a leer mientras su padre y sus hermanos hablaban sobre cómo encontrar a Leo. Después de unos segundos, Apolo se dio cuenta y encendió su poder, sorprendiéndola a ella y al resto del grupo. "No hay trampas, hermana".

Athena miró fijamente la sonrisa engreída que él le dio. "Bien, pero ¿podemos comenzar entonces? Ya llegamos bastante tarde y estoy interesado".

"Claro hermana, pero ¿tú-" Atenea gruñó y Apolo se calló.

Naruto estaba parado en medio del piso del baño de chicas junto a una chica rubia. Ambos estaban empapados, la chica más que Naruto ya que lo había protegido con su cuerpo, con agua del retrete.

Annebeth miró a Percy, quien se estremeció bajo su mirada. "¡Otro yo!"

Por alguna razón, su hermano estaba en el único lugar seco de toda la habitación. El trío se miró en silencio y luego caminó hacia la entrada del baño de niñas para ver a Clarisse y sus hermanos (Naruto no sabía que lo eran), retorciéndose en el barro hecho con el agua del inodoro.

Ares apretó los dientes. Todavía recordaba cómo Percy humillaba a sus hijos y cómo él no podía tocarlo. Posiden y Zeus miraron a Ares para recordarle ese hecho y Ares hervía en su trono.

"Aww, me estoy perdiendo algo interesante".

"Y ahí está ese zorro". Apolo tarareó mientras lo miraba.

"No mucho, Kyuubi. Esa chica gorila y sus amigas iban a presentarme la capacidad de drenaje de un inodoro de manera cercana y personal". Naruto le refunfuñó a su amigo.

Frank se frotó las sienes mientras intentaba no pensar en su lado idiota de Marte y sus otros hijos. De esa manera la vida era mucho más fácil. Reyna frunció el ceño, "¿Es esto algo que les sucede a todos los campistas nuevos?"

"Bueno..." Annebeth se fue apagando lentamente cuando surgieron varios recuerdos.

Luego se animó y habló con entusiasmo: "Pero hermano hizo esto con los baños e hizo que el agua alejara a los matones".

"Fue impresionante teniendo en cuenta que no tenías ningún entrenamiento, pero ¿agua de retrete?" Anfitrite le preguntó a su hijastro, a quien él y su padre arrojaron nerviosamente y tímidamente.

"Quizás su padre debería limpiar ese atasco en el ala oeste". Hades mencionó y recibió una mirada fulminante de su hermano. Zeus y Hera parecieron pensativos ante la idea.

Kyuubi bostezó. "Ese es un buen equipo. Pero ahora apestas muchísimo"

"No es mi culpa. Al menos ya no parezco una niña pequeña jugando a disfrazarse".

"Verdad."

"Pero ahora hueles y ambos sabemos lo que eso significa". Kyuubi sonrió ante la mirada horrorizada de Naruto.

"...No..."

"Sí", chisporroteó Kyuubi. "Hora del baño."

"El horror." Hermes se cerró ante el recuerdo de su primer baño. "Lo siento por ti, niño, de verdad que lo siento".

"Oh, supéralo, Hermes", reprendió Hestia mientras tomaba un sorbo de una bebida que tomó del hogar.

Leyendo el hijo de las ReinasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora