El ascenso de una reina y la caída de un rey.
El heredero al trono, está muerto, su hermana menor, pero siguiente en la línea, va a sustituirlo.
Anna Diana Elizabeth Taylor Mary, con suficientes nombres como para confundir a una persona, tendrá que...
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𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐗𝐈𝐈𝐈
En el bosque
- War Of Hearts.
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Una hora después de toda esa conversación, todo el grupo de caballeros y las dos damas junto a una chaperona (una sirvienta que muy apenas y sabía cabalgar), ya estaban adentrándose en el bosque cercano a la casa de campo en Aubrey Hall. Benedict cabalgando junto a Anthony, muy por delante de Anna. Estaba tan arrepentido, se sintió así en cuanto vio el rostro de Anna cambiar cuando él la llamó "princesa". No había sido su intención, las palabras salieron con espontaneidad, incluso, Benedict solo se dio cuenta cuando Anna lo miró con las cejas curvadas hacia arriba, decepcionada. No sabía porque seguía estropeando todo, pero quería lanzarse del caballo y dejar que lo aplastara para que acabara con su tormento.
—¡Benedict! —. Exclamó Anthony, espantándolo, casi provocando que él cayera del caballo.
—¡¿Qué?! —. Se quejó Benedict, con el ceño fruncido. Anthony le indicó disimuladamente con la cabeza, mirar hacia atrás.
Y él sólo miró superficialmente, casi de reojo. No podía ver mucho, sólo a Anna cabalgando en medio de la señorita Sharma y Eric, justo detrás de los hermanos Borbón. Lo único que le aclaró la insistencia de Anthony para que Benedict mirase, fue la carcajada que escandalizó los oídos de Ben. Una carcajada de dos, porque la señorita Sharma no reía ni aunque Eric contase el chiste más divertido del mundo.
—¿Que pasó anoche? —. La voz de Anthony nuevamente... casi lo hace caer al barro.
—¿A-anoche? ¿De qué hablas? —. Benedict se hizo el tonto.
—Nunca nos dijiste a Daphne y a mí si la princesa se enojó contigo por tu episodio de anoche.
—¿Que episodio? —. Anthony inclinó la cabeza hacia un lado, con la sonrisa sesgada.
—Cuando derramaste el vino sobre la mesa y le salpicaste el vestido.
—Ah... no, no lo creo.
—¿No lo crees? —. Benedict negó con la cabeza. —¿Entonces? ¿Qué está sucediendo? —. Benedict tragó saliva al oír a su hermano.
Se encontraba en la misma situación de ayer, cuando Colin le preguntó la razón de la miseria en su rostro, e igual que hoy por la mañana, cuando Anthony y Daphne exigieron los avances en su relación con Anna. ¿Cómo podía contarles todo a sus hermanos? Era imposible. Eran sus hermanos y amigos, pero no estaría exento de una reprensión por parte de Anthony y las miradas juzgonas de Colin. No había manera, por donde lo viera, todo era incorrecto.
