Eres mía

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Narrador: la rubia no podía creer lo que estaba ante sus ojos, un toldo enorme cubría una cama con pequeñas cortinas de seda blancas por todo su alrededor, 4 fogatas estaban alrededor del toldo para brindarles calor en esa noche fría pero despejada, una mesa bien decorada con sus cubiertos, copas y una botella de champan enfriándose, un camino de pétalos enseñándoles en camino de donde estaban paradas hasta la mesa y luego la cama, detallo la cama y vio como los pétalos rojos adornaban la cama con forma de corazón, no pudo reprimir las lágrimas de felicidad que salían de sus ojos.

Lexa: un poco cursi lo sé – dijo besándole el cuello – pero es lo único que provocas en mí.

Clarke: Lexa es maravilloso todo esto – dijo al girarse y besarla intensamente.

Lexa: será nuestra primera vez – dijo limpiándole las lágrimas con sus besos – debe ser muy especial este momento.

Clarke:gracias por esto – dijo al abrazarla.

Lexa: no,gracias por aceptarme – dijo al besarla.

Clarke: no tienes que agradecerme – dijo perdiéndose en sus ojos azules – la afortunada soy yo de que aceptaras casarte conmigo...

Lexa: shhh eso ya no tiene importancia – dijo al abrazarla – ahora nuestra vida es esta para siempre – la beso dulcemente – vamos a cenar.

Narrador: la rubia solo le asintió y se acercó junto a la Castaña a la mesa que las esperaba, la Castaña saco de una cava unos envases plásticos los cuales estaban calientes debido a que la cava era térmica, sirvió sus platos y a pesar del nerviosismo de lo que pasaría después la cena fue agradable, comentaron lo acontecido en las carreras y en la feria ambas se sentían tan bien que cuando llego el postre solo se miraban a los ojos, el mousse de chocolate y fresas estaba servido así que cuando comenzaron a comerlo, la rubia sonrió enormemente logrando llamar la atención de la Castaña.

Lexa: ¿qué ocurre? – pregunto un poco divertida ya que esa sonrisa de la rubia la hechizaba.

Clarke: solo que pareces una niña al comer – dijo divertida.

Lexa: solo que adoro este postre – dijo sonriendo.

Clarke: sial igual que tu rostro – al decir eso se acercó a ella – estás manchada de chocolate, déjame ayudarte – al decirle aquello poso sus labios por la comisura de sus labios y en un acto atrevido le paso la lengua para limpiar el chocolate– ya estás limpia – la Castaña estaba casi paralizada por eso, pero al ver como la rubia se alejaba se embarro los labios de chocolate.

Lexa: creo que aun te falto – dijo sonriendo, la rubia solo negó con su cabeza y se acercó a ella.

Narrador: la rubia comenzó a limpiar sus labios con su lengua excitándolas a ambas, al terminar se fundieron en un beso intenso eso fue suficiente para ambas era el momento de dejarse llevar, la Castaña se levantó con cuidado atrayendo a la rubia hacia su cuerpo poco a poco la fue encaminando hasta la cama, al estar allí se vieron por un momento y casi sin apartar sus vistas comenzaron a desabotonar cada botón de la camisa de la otra, ambas sonrieron al verse libres sin camisas y solo en camisetas volvieron a besarse mientras sentían sus pieles con las yemas de sus dedos, a pesar de que no era la primera vez que se sentían de esa manera el nerviosismo de ambas era evidente.

Lexa: eres tan hermosa – dijo al besarle el cuello, mientras la rubia gemía de manera suave.

Clarke: te deseo tanto Len – dijo al besarle el hombro.

Narrador: la Castaña busco la boca de su esposa de manera desesperada, al encontrar la intensificando el beso cuando sus lenguas se entrelazaron jugando en sus bocas,saboreándose y conociendo cada centímetro sacándose varios suspiros y jadeos,las manos de la Castaña llegaron a las caderas de la rubia para comenzar a buscar el botón, lo desabrocho y le bajo el cierre de manera rápida para luego acariciarle el abdomen, logrando hacerla estremecer luego con cuidado la sentó en la cama y se pudo de rodillas ante ella, ambas se miraban con extremada ternura y un poco de deseo la Castaña le fue quitando las botas con cuidado, la rubia de no pudo esperar más y llevo sus manos al pantalón de la Castaña,desabrochando los 4 botones que tenía al abrirlos noto el bulto escondido tras los bóxer negros que llevaba, ambas sonrieron ante aquel momento ambas se sentían nerviosas pero deseosas de seguir, ninguna se atrevía a dar el primer paso solo para no presionar a la otra, Lexa en un momento se quitó sus botas estando allí de pie ante esta acción la rubia tomo su camiseta y se la quitó,dejando al descubierto sus senos ya que no llevaba brassier eso termino de enloquecer a la Castaña, que de un simple movimiento saco su camiseta de su cuerpo para luego arrancarle el jean a su esposa, ambas sonreían mientras la Castaña se montaba en la cama.

Me enamore de mi esposa adaptación ClexaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora