amor en la radio

Recuerdos

Lucifer dormía plácidamente en su habitación, inmerso en un sueño donde se reunía con su amada Lilith. En la ensoñación, se perdían en besos cargados de nostalgia, mientras él murmuraba su nombre con afecto.

-Lilith... Te he echado tanto de menos... -susurraba mientras la besaba en el sueño.

En su mente, Lucifer atrajo a Lilith con pasión desesperada, anhelando su cercanía. Sus manos recorrieron el delicado cuerpo de Lilith, apreciando cada detalle. Con gestos suaves, despojó su vestido para admirar su figura divina. Continuó besándola con pasión, como si quisiera grabar su presencia en su piel para siempre. Descendió lentamente, saboreando la dulzura de sus pezones y explorando con ternura su abdomen. Pero justo cuando estaba a punto de acercarse más, alguien lo sacó abruptamente de su sueño.

-Majestad... Majestad... Majestad! -Dijo Alastor tratando de despertar a Lucifer quién ya hasta parecía tieso.

Lucifer se despierta sobresaltado, aún sintiendo el momento, dejando sus mejillas sonrojadas. Miro de reojo a Alastor y empezó a transformarse ya que seguía enojado con él.

-Majestad! Espere... No quiere que su hija se enoje con usted por matar a su querido anfitrión... No cree?

-Maldito hijo de puta! QUIEN TE CREES PARA VENIR AQUI COMO SI NADA!? -Lucifer empujó a Alastor contra la pared, ahorcandolo del cuello mientras preparaba su bola de fuego.

Alastor solo le sonrió de oreja a oreja.

-Majestad... Yo solo le aviso que su hija se va a enfadar mucho con usted.. Que pensará ella si me matas?

Lucifer por mucha ira que sentía lo dejo pasar pero aún así no soltó a Alastor.

-Bien! Maldito idiota... Que quieres de mi!?

-Yo? Nada... Solo quiero disculparme con usted y- Alastor sintió algo golpear contra su pierna, confuso bajo la mirada y sorprendido, bastante enojado empujó. Lucifer.

Lucifer se quedó confuso.

-Que coño te pasa!? -Dijo Lucifer enojandose.

-Mejor dicho, qué coño le pasa a usted! Tiene su... Cosa parada y la pone contra mi pierna!?

Lucifer se sorprendió y bajo la mirada, se dio cuenta que su pantalón tenía un bulto debido al sueño que tuvo, se avergonzó bastante, tapándose con la mano.

-Bueno! Perdón! Yo que voy a saber!

-Cómo que "yo que voy a saber"!? Eso se siente! Al menos que su cosita sea de la misma altura que usted -Dijo Alastor riendose burlonamente.

-Deja de decir "cosita" no somos niños chiquitos, se llama polla, verga, berenjena, callaputas, miembro, pito, comes, plátano, salchicha, longaniza, bicho, pene, herramienta mágica, paquete-

-Bien! Ya me ha quedado claro! Se que se le llama así pero eso arruinaría mi elegancia. -Dijo mientras se acomodaba el cuello de su chaleco.- Espere... Como que "comes"? -Dijo Alastor dándose cuenta.

Lucifer se rió bastante agarrándose de la tripa.

-Jaja... Que chistoso es majestad...

-Ay... Ya... No puedo evitar reírme de tu "elegancia" cuando solo eres más inocente que mi querida Charlie. -Dijo Lucifer haciendo comillas con sus dedos.

-Disculpe? No se crea que su hija es una santa, ya jugó varias veces a las tijeras con su novia, como lo se? No se, quizás porque siempre me despiertan con el ruido de la cama! -Dijo Alastor enojado.

-Mientes! Mi hija es lo más puro de este infierno.

-Pues bien que le da a la Vaggie, y viceversa... -Dijo Alastor murmurando.