Felipe POV
Realmente me había sorprendido Letizia, tan hermosa mujer y delicada podría ser tan pero tan buena surfeando mejor que yo, realmente ella era perfecta, delicada, hermosa, atrevida, tierna ella era simplemente perfecta.
Nunca creí que fuera capaz de ser tan ruda a la vez, pero sin duda lo que más me gusto de ella fue su escultural cuerpo, esas largas piernas, sus curvas sus pechos a pesar de no ser muy grandes eran perfectos nunca me cansaría de decir que ella es perfecta nunca lo haría y la mejor parte es solo mía, mía y de nadie más.
Cuando habíamos llegado a la casa la enana y yo decidimos irnos a nuestros respectivos cuartos, ya era tarde así que tenía que dormir pero antes de dormir solo pensé en una persona en Leti mañana la vería otra vez y esta vez no habría ningún duende o algún colado como hoy.
Desperté por el sonido de mi celular estaba sonando quien podría ser aun es muy temprano bueno eso creía yo. Cuando me percate de quien era una y gran sonrisa se dibujo en mi cara era Letizia.
-mi amor como amaneciste-dijo ella con su tono tan dulce
-bien amor extrañándote y tu. –Conteste, enserio que la amaba.
-bien, te hablo para decirte que podemos ir a la plaza a ver una película y luego ir al parque a caminar un rato que te parece?-pregunto.
-me parase genial, no te preocupes esta vez no se lo diré a Cristina
-jaja, - y entonces oí su hermosa risa musitar por el otro lado del teléfono.
-hermosa que te parece si voy por ti a las 12 del día.
- Felipe ya son las 12 del día a caso te acabas de despertar.-pregunto burlonamente.
-Demonios eran las 12 del día y yo acabándome de levantar es que nadie pudo despertarme.
-bueno amor creo que el día de ayer me canso un poco-dije apenado por mis actos.
-está bien entiendo, entonces a qué hora bienes por mi?
-mm que te parece ala 1 de la tarde?-pregunte
-está bien no tardes te quiero.
-yo te amo
-adiós
-adiós princesa.-dije y colgó.
Me había alegrado que aquella chiquilla de ojos verdes, mi hermosa princesa me haya despertado, que lo primero que escuche en el día fue su hermosa voz que decía mi nombre, que me decía esas palabras tan comunes en una pareja pero tan hermosas cuando salían de sus labios.
Realmente estaba tan enamorado de ella, pero creo que debería de dejar de pensar en eso por un rato, tenía que arreglarme, si no quería llegar tarde a mi cita.
Tome una ducha después busque algo de ropa en mi guardarropa opte por ponerme unos pantalones negros algo deslavados, una playera gris y una chaqueta negra con unos zapatos del mismo color que esta. Trate de peinar mi cabello pero como era caso perdido y pérdida de tiempo lo deje tal y como estaba baje a desayunar un poco mejor dicho a comer un poco a la cocina, cuando entre ahí estaba mi madre Sofia.
-hola Felipe veo que te despertaste tarde.-dijo ella con su tono tan maternal de siempre.
-mm de hecho me despertó Letizia.
-enserio?-pregunto incrédula.
-si mama es que, quede con ella de salir hoy, pero ella me iba a llamar para ver a donde salíamos.
-que bien y adonde van a…-y no termino la frase porque en eso intervino Cristina.
-si Felipe a donde van a ir?-pregunto, tratando de averiguar algo.
