Lucifer Magne adoptó un gato que apareció relativamente de la nada, Alastor no está seguro de las decisiones de su pareja y la criatura tampoco le daba muy buena espina ¿Y qué si estúpidamente se parecía a él? Parecía una broma de mal gusto.
Acompañ...
Quiero advertir que tal vez no se entienda el capítulo, pero si lo hiciste ¡Felicidades! Y si no, no te preocupes, al final les dejo la explicación.
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Podía escuchar los sollozos del ser alado. El hombre de vestimenta blanca, brillante cabello dorado y hermosas alas tras sí yacía apoyado sobre sus rodillas cubriendo su rostro con sus manos.
En el infinito vacío en el que se encontraban, un pequeño charco de agua comenzaba a agrandarse justo debajo del angelical ser, lágrimas y más lágrimas, una tristeza constante que lo hacía sentir tan enfermo como para dudar de su propia conciencia.
Sea quien sea, solo estaba consciente del sujeto y de sí mismo, aunque no fuera capaz de ver su propia forma entre tanta obscuridad y la única luz, era la que emitía el desdichado ser.
— "Esto no está funcionando, se acabó. No puedo dejar a mi hija con alguien como tú."
La figura de una mujer bastante alta apareció justo en el frente del hombre, no podía distinguirse su rostro, pero si el largo vestido que llevaba y la cabellera rubia hasta las caderas, en sus brazos, un infante que estiraba sus manos hacia el alado ser.
— "¿No lo entiendes? Por lo menos él intenta apoyarme protegiendo el hotel ¿Cómo es posible que mi propio padre no pueda hacerlo?"
Ahora, una chica con cabello largo y rubio sostenido por una coleta, al igual que la primera, era imposible identificarla. Sus palabras dolían y la figura alada solo se dobló más entre sus piernas, su rostro casi tocando el suelo mientras su cuerpo comenzaba a emitir un temblor de pánico.
— "¿No es increíble? Regresaste triunfante y acabaste con el mal, una escena digna de admirar. ¿Te crees realmente un padre cuando solo lo fuiste cinco minutos?"
Una aterradora figura sonriente se alzó justo después, mucho más alta y con grandes astas y garras, los tonos carmines se distinguían junto a esos extraños ojos en forma de diales que parpadeaban.
Las grandes alas cayeron al suelo en un ruido sordo, el dolor más palpable y la soledad cada vez más fría. Frío, era como caer en el océano y ahogarse, tragado por las profundidades sin poder ver la luz del sol.
— "Tu propio egoísmo es un pecado, estás tan cegado por el orgullo que no puedes ver tus errores. Vivirás en agonía en ese mundo junto a aquellos a quienes diste "libertad". Lucifer, que desgracia haberte creado"
La voz era mucho más prominente, las tres figuras anteriores desaparecieron para convertirse en un ser gigante con miles de ojos que lo observaban, un nuevo sentimiento se unió a los caóticos de antes: Miedo.
"Solo quería ser como tú"
Una nueva voz, esta vez de la entidad angelical que sollozaba, la voz entrecortada y débil. El cuerpo del hombre se enderezó finamente mostrando el rostro del ser llamado Lucifer. Su mirada bajó a sus manos, apretándolas con fuerza en su pecho, rogando por salir de esta pesadilla infinita.
