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El día de hoy la pelirroja había faltado a la escuela, Louis se encargó de decirle a todos que estaba enferma.

El timbre de la casa fue lo único que hizo que Leila se levantara, al abrir la puerta se encontró a Jasper con un ramo de rosas y en la otra mano una caja de donas.

 - No tenías por qué comprar eso tan lindo- dijo Leila con los ojos cristalinos.

- Pero no quiero que llores- dijo Jasper entrando a la casa.

- Te puedo enfermar- dijo Leila evitando que Jasper la abrace.

- Lo dudo- dijo Jasper dándole un beso en la frente.

Leila guio a Jasper a su habitación y ambos se acostaron

- ¿Que te enfermo?

- Anoche estuvimos en la reserva hasta muy tarde- explico Leila- Creo que eso me hizo daño.

- Pasas mucho tiempo en la reserva- dijo Jasper intentando ser sutil.

Era cierto habían pasado dos semanas desde que Billy le dijo la verdad y lo único que hicieron los mellizos fue ir más a la reserva.

- Hicimos amigos- explico Leila.

- Y está bien- dijo Jasper- Pero mis hermanos se sientes abandonados.

- ¿Tú o tus hermanos?

- Yo vengo cada noche a ver películas- dijo Jasper burlón- Pero Alice si se siente un poco abandonada.

- Iré hoy a visitarla- dijo Leila, al terminar de hablar volvió a estornudar.

- Le llamare a mi padre y le preguntare si te puede recibirnos hoy- dijo Jasper sacando su celular.

- ¿Para qué?

- Estas enferma Leila- dijo Jasper obvio- Y él es doctor.

- Solo necesito que estes aquí- dijo Leila haciendo que Jasper se acueste en su pecho.

La chica se durmió unas horas, cuando despertó miro que Jasper aún seguía en su pecho, la chica le empezó a dar caricias en su cabello.

Jasper fingía estar dormido, las caricias que Leila le daba lo hacían estar en paz. Y hubiese seguido así por un largo rato, de no ser porque Will apareció con su traje de policía y Jasper no pudo evitar reír.

- Leila por el amor de Dios, sácale eso, los gatos del barrio lo deben molestar- se quejó Jasper.

- ¡Se ve muy tierno! 

- ¿Como te sientes? -pregunto Jasper.

- Ya mucho mejor- dijo Leila- Tus padres me van a odiar cuando se den cuenta que faltaste a la escuela por mí.

- Mis padres son incapaces de odiarte- dijo Jasper.

- Me voy a bañar- dijo Leila- No falta mucho para que llegue Louis.

Jasper acepto y la pelirroja se metió a bañar demasiado, cuando salió esperaba tener a Jasper aun en su habitación, pero no fue así. 

La chica se terminó de arreglar y empezó a buscar a Jasper en el piso de abajo. Su sorpresa fue grande cuando se dio cuenta que Jasper estaba cocinado. Estaba haciendo tortitas.

- Creí que no se te daba cocinar- dijo Leila al ver a Jasper estresado.

- No se me da- dijo Jasper- Pero estoy preparando el desayuno más delicioso del mundo para la chica más linda.

Leila se acercó a y abrazo a Jasper por atrás dándole un beso en su espalda.

Jasper la hizo sentarse en una silla mientras él terminaba de preparar el desayuno, y finalmente lo dejó en la mesa. 

Dayligth | Jasper HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora