XVIII

418 27 5
                                    

(...)

Draco estaba completamente maravillado, la verdad. ¿En qué momento Harry le había hecho un oral? Ni él mismo lo comprendía, porque bueno, es díficil olvidar semejante cosa. Draco simplemente disociaba a toda hora pensando en ese momento. Merlín, Harry lo ponía de un modo que ni él mismo había visto. Harry era seductor y sensual, coqueto sin saberlo, en resumen.

Harry, por su lado, estaba más que feliz por sacar a la luz a esa... versión de Draco. Aunque le sorprendió demasiado que él sea un sumiso en ese aspecto, pues él es dominante, en donde lo veas. Pero si lo has visto de esa forma, es decir, desnudo, él no es para nada dominante. A Harry solo le tomó un par de minutos y lamidas en el cuello del rubio para hacerlo jadear su nombre y suplicarle embestidas, a las cuales, no aceptó, por más que hubiese querido embestirlo al platinado en todas las posiciones habidas y por haber, ya que, bueno... Ellos estaban en un hospital, y mierda, fue jodidademente arriesgado hacerle un oral en un puto hospital, porque, a ver, es un lugar público, y era de tarde, asi que perfectamente los dos pudieron ser descubiertos en pleno acto. Y por lo menos Harry creía que encontrarse a tu paciente y a su visita en pleno acto "inmoral" no es muy cómodo pero... Draco lo hacía tener una lujuria inimaginable, él era muy atractivo.

Harry era completamente consciente de que él estaba enamorado de Draco, lo que le aterraba era que Draco sólo lo quiera de manera sexual y no amorosa, ya que prácticamente todas las chicas quieren estar con él por su apariencia y por su fama de "El Elegido". Pero... Él confiaba en que Draco podría no quererlo de esa manera, él tenía la esperanza de que Draco lo amara.

Y mientras tanto, Draco, ya había descubierto verdaderamente sus sentimientos hacia el azabache. Lo entendió, lo comprendió, lo descubrió, él estaba enamorado de Harry.

Harry decidió contarle a Ron, ya que él estaba allí en el momento en que lo supo, Ron lo miró con terror irónico, para luego reírse y desearle una buena suerte si es que él se le confesaría a Draco. Draco les dijo a Pansy y a Blaise. Pansy chilló a más no poder, y Blaise se rio y lo felicitó, estando orgulloso de que Draco por fin oyera a su corazón, y no a su mente.

-Estamos muy orgullosos de ti, Draco -Pansy confesó-. ¡Mira cuánto has madurado! Ya no eres ese estúpido niño purista de sangre y un imbécil.

-¿Es un halago o un insulto?

-Ambos. -rio-

-¿Cómo te sientes al saber que te gusta Potter? -Blaise preguntó-

-No lo sé... Libre, puede ser. Descubrí de una vez por todas quién soy en realidad, y que no me gustan las mujeres, definitivamente.

-¿O sea que te proclamas gay?

-Supongo. Nunca me han ido las mujeres, la verdad.

-Hieres mi ego como mujer, Draconis.

-¡Basta con esos apodos espeluznantes, Pansy!

-¡Jamás!

. . .

Harry estaba asustado, porque sí, le tocaba la segunda prueba del Torneo. Y estuvo sobrepensando desde la noche anterior, pensando que como es su suerte quien va a jugar también, probablemente haría que Harry se ahogara o no funcionara el branquialgas que Neville le daría.

Pero, para su suerte, no fue así. Al fin y al cabo él quedó en segundo lugar por salvar a Ron y a la hermana de Fleur, así estando más cerca de ganar el Torneo, aunque no fuera lo que él quisiera.

Estaba regresando al castillo, cuando notó un sombrero tirado, lejos de donde estaba la gente.

-¿Qué carajo? -pensó-

Sólo es un Juego [Drarry/Harco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora