La Patrona

Capítulo 5

Las cosas en el lugar eran tensas, Lucía empezó a llevarse mal con Boscha, cosa que le incomodaba mucho. ya que supuestamente eran amigas. pero Lucía decidió ser fuerte, no se iba a echar a morir por nada, ya nada ni nadie la destruiría.

Se preparó a la esa noche, la chica de piel morena se acerco a Lilith diciendo:

-a que hora debo ir al motel del local? 

-a las once. recuerda ser puntual. -dijo Lilith quien se iba retirando

-espere señora Lilith, quisiera pedirle un favor. -dijo Lucía

-bien, de que trata...? -dijo Lilith

Mientras tanto en las habitaciones, Willow se maquillaba cuando de repente, esta dijo:

-cuando tiempo más piensas odiar a Lucía, ella no hizo nada, no es su culpa de que esa Blight te haya prometido eso. 

Boscha, quien se encontraba poniéndose sus medias de rejilla negra, no dijo nada, solo suspiro con cansancio, se puso de pie y fue a buscar a Lucía, logrado dar con ella, observo que ella hablaba con Lilith, Boscha les miró con extrañeza. 

-bien. yo me encargare de traerte lo que me pides. 

-gracias. -dijo Lucía 

cuando Lilith se fue, Boscha se le acercó diciendo:

-oye.

Lucía le miró y le dijo:

-Boscha. 

-quiero que me expliques... que fue lo que te dijo Amelia Blight esa noche cuando estuvo contigo. -dijo la de cabello fucsia. 

-me dijo que me sacaría de aquí, pero descuida, yo no lo creo, Lilith ya me dijo que ella no se repite el plato. no tengo esperanzas de que eso suceda. -dijo Lucia- me siento sucia. -dijo casi escupiendo.

-estuviste que con una Blight, que más quieres? 

-quiero irme. -dijo Lucia para luego sonreír- pero tampoco se puede.

y finalmente se fue a la habitación que compartía con Boscha y Willow. 

la noche caía de a poco, fue entonces que Lucía se preparaba para su estadía con aquel nuevo comprador. se dirigió a la misma habitación donde se entrego a aquella chica, pero esta vez, no iba de ingenua, sabía su lugar en ese antro. 

ella entro a la habitación, encontrándose con un hombre joven, de mirada magenta y cabello rubio, él al verla, sonrió, la de piel morena, por mero protocolo de su trabajo, le sonrió, entro al cuarto y cerro la puerta tras de ella.

todo aquello observado por cierta chica de cabello teñido color menta, quien se dirigía a una habitación para esperar a la chica la cual compro por unas horas.

dos horas después, aquel hombre, se encontraba besando el cuello de Lucía, ella quien le daba la espalda para volver a colocarse la ropa, se sentía relajada, aunque le dolía un poco las caderas, ya que él fue un poco brusco, sin embargo al momento de la intromisión esperó un poco. para que ella se acostumbrase.

-insisto en saber tu nombre... -dijo él con clara voz ronca.

-Lucía Noceda. -dijo ella mirándole con una sonrisa- puedo saber tu nombre muñeco?

-Hunter, Hunter Wittebane. -respondió él sonriendo 

-bueno, joven Wittebane, es un gusto conocerle. -dijo la de piel morena sonriendo.

-mañana... mañana pagaré de nuevo por ti. no se que has hecho, pero, quiero estar contigo de nuevo. -dijo Hunter

-bueno, nos quedan treinta minutos... -dijo Lucía, guiándolo de nuevo a la cama- le gustaría aprovecharlos?

-claro que sí. -dijo el rubio cenizo sonriendo.

listo para seguir tomando a Lucía de manera carnal, el sabía que podría volverse adicto a aquella chica, sin embargo, no le importaba. la necesitaba en ese momento. y no perdería ni un minuto.

mientras tanto, Amelia Blight, se encontraba saliendo de la habitación, acomodándose su blusa y su cabello, había pagado el 50% del precio total, lo había abonado por garantía, y ahora debía pagar el otro 50%. 

iba caminando por ese pasillo, pero no pudo evitar mirar hacia la puerta de la habitación, la cual se encontraba Lucía, cumpliendo con tu trabajo. la chica de larga cabellera teñida color menta sintió una leve opresión en el pecho.

suspiró con pesadez y se fue a pagar el resto que le debía a Lilith.

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Continuará.