Test de Turing

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Spoiler del final de ambos libros. Inspirado en pixelada perfecta.
What if donde Zac no conoce a Hallie y Dean se termina enamorando de Laila.
Parejas: Zac x Hallie, Dean x Laila. Centrado en Zac.

***

"El amor es un elixir incluso más difícil de conseguir que la piedra filosofal. Para amar, hay que perder y ganar; sobre todo, aceptar aquellas cosas fuera de nuestro control."

Zac consideraba que pocas personas tenían ese privilegio. Lo aprendió desde niño con sus padres, aquellas personas que se querían entre sí y a sus hijos, pero nunca lo suficiente para que sea amor. Por otro lado, estaba su hermano menor, Dean, quien amaba con la intensidad de mil soles todo lo que se cruzaba en su camino, el amor era su único idioma y el que se empeñó en enseñar a Zac desde que nació.

El amor implica darle a otra persona el poder de destruirte. Es el mayor estado de vulnerabilidad.

Así que no se sorprendió el día que su vecina, Nicole, le rompió el corazón. Sabía que en algún momento sucedería, esperó en silencio, acompañándolo mientras unía cada pieza, cuidando que los cortes no fuesen profundos y dándole su tiempo para sanar.

Y así como Dean abrazó el dolor de no ser correspondido, eligió seguir amando. Nada le impediría a su hermano vivir por el amor. Por ende, se alegró mucho cuando le presentó a Laila Miller, una compañera de su curso, que bañó sus cicatrices en oro y creó un nuevo brillo en sus ojos. Compartió la felicidad de su hermano, cuando se enteró de que, después de años de noviazgos, contrajeran nupcias y compartieran una preciosa casa a las afueras de la ciudad.

Ojalá tener la misma suerte para encontrar el amor.

"—El amor no se encuentra, hermano mayor. El amor se construye, alimenta y nutre, como una planta, como una mascota. Es un ser vivo. —Dean era un romántico empedernido y ni siquiera se había dado cuenta—. No es romanticismo, es la verdad. Cuando aceptas que no es arte de magia y pones de tu parte, el amor deja de ser inalcanzable para estar en la palma de tu mano."

Suspiró, recordando las palabras de su hermano. Negó un par de veces antes de tocar el timbre, dio dos pasos atrás, contemplando la fachada de la casa, preguntándose si Dean no se sentiría solo, hasta que escuchó una serie de ladridos provenientes del jardín trasero. Aunque estuviera en medio del desierto, encontraría un animal que adoptar. La puerta no tardó en abrirse, mostrando el cansado rostro de su cuñada.

—Hola, Zac —saludó rápidamente, haciéndose a un lado—. Bienvenido a casa, pasa, por favor. Dean acaba de salir para recoger el alimento del refugio.

—Hola, Laila, es un gusto verte —devolvió el saludo con una sonrisa incómoda. Además de su hermano, le costó demasiado trabajo entablar relaciones interpersonales con terceras personas. Para su suerte, su cuñada tenía una personalidad fácil de amar, así como su hermano. Aún le costaba estar en el mismo canal que ella, pero Laila nunca lo presionó, dándole su espacio y apoyo en silencio—, esperaré a Dean, si no es un inconveniente.

—Para nada —restó importancia—. Si quieres pasar a la biblioteca, me llegaron nuevos libros de medicina que podrían interesarte —agregó guiñándole un ojo—. Estaré en mi laboratorio, por si me necesitas. Ya sabes, es tu casa también.

Zac negó con una sonrisa. Dean definitivamente tenía suerte. Encontró a una persona que amaba igual o más que él, que es inteligente, graciosa y divertida... además de ser la única heredera de una prestigiosa cadena de Hospitales. Su hermano podía dedicarse tiempo completo al refugio de animales financiado por la familia Miller, mientras su esposa se enfocaba en diferentes investigaciones.

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⏰ Last updated: Apr 02 ⏰

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