Su relación se había vuelto monótona, siempre era lo mismo, la emoción se perdía y tal vez incluso el amor... pero un día unas extrañas cartas le empezaron a llegar al Hatake
¿Acaso se estaba enamorando del autor de aquellas cartas?
El amor, ese hermoso pero doloroso sentimiento... Hatake miró cómo Naruto, Sakura y Sasuke entrenaban. Desvió un poco la mirada, pensando, "Un amor verdadero", así es como su alumna describía su relación con Obito. Después de todo, el peliplata siempre había amado al pelinegro, pero este último no lo había amado desde siempre. Ambos eran niños cuando los sentimientos de Kakashi hacia Obito comenzaron a desarrollarse. Al principio, era simple admiración, pero poco a poco, mientras ambos crecían, el Hatake se dio cuenta de que la admiración se había convertido en amor. Sin embargo, mientras él amaba al Uchiha, el Uchiha estaba enamorado de su compañera y siguió enamorado de ella por varios años, hasta que Minato les había puesto la misión de llevarse bien. Solo por eso, el Uchiha había cambiado un poco y fue justo después de la misión del Puente Kannabi que habían empezado a salir... Pero Kakashi nunca supo si el Uchiha había dejado de amar a Nohara. ¿Y si la seguía amando? ¿Acaso habrían iniciado un romance?
-Kakashi-sensei -la voz de una pequeña pelirrosa lo sacó de sus pensamientos.
-¿Qué pasa, Sakura?
-Terminamos -habló el pelinegro.
-¿¡Tenemos alguna misión hoy!? -preguntó con entusiasmo el rubio.
El Hatake miró al Uzumaki con nostalgia; recordaba mucho a Obito cuando era pequeño.
-Hum -quedó pensativo y sacó un cartel de "se busca" de su bolsillo-. Tenemos que buscar a un gato.
-¿Otra vez? -preguntaron los tres niños al unísono.
-Sí -hizo una pausa, viendo la cara derrotada de los niños-. Bien, el que lo encuentre me acompañará a una misión fuera de la aldea.
Tanto el niño rubio como el pelinegro salieron corriendo a buscar al mencionado gato. El Hatake soltó una pequeña risita. Les había mentido, después de todo, el Uchiha no lo dejaba salir ya que era "peligroso".
-Kakashi-sensei -habló la Haruno.
-Hum, ¿qué pasa, Sakura?
-¿Está bien?
-Sí, ¿por qué la pregunta?
-Pues -la pelirrosa puso su mano en su barbilla-, lo he visto pensativo y parece estar triste. ¿Acaso peleó con Obito-sama?
El Hatake se quedó un momento en silencio.
-Tal vez, son cosas de adultos.
-Bueno, mientras se sigan amando, todo estará bien -dijo la niña con una pequeña sonrisa, para después irse con sus compañeros.
El Hatake suspiró. ¿Realmente el Uchiha lo amó alguna vez?
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