CAPITULO 10

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Tenia una toalla alrededor de mi cuerpo ya que acababa de bañarme y comencé a buscar el vestido rojo que usaría hoy en la tarde, me costo un poco convencer a Petter de que me prestara sus cuernos del traje de diablo que uso el año pasado pero a fin de cuentas los conseguí, cuando encontré el vestido me lo puse rápido, era un rojo de un color tan fuerte que transmitía poder, valentía, fuerza... vale ya sonó muy dramático, el punto es que es un color hermoso, era un vestido de hombros así que por lo tanto enseñaba parte de mi espalda dejando en vista mis bellos lunares, llegaba un poco mas arriba de la rodilla y me quedaba ajustado al cuerpo y por pura comodidad me puse tenis. Mi cabello no se quedó atrás ya que lo planche y me coloque la diadema y por supuesto que me maquille, use lo de a diario, pero la única diferencia era ese labial rojo, que era un rojo intenso que solo usaba en ocasiones especiales.

Con todo lo que llevaba encima me sentía preciosa.

—Hija...—entro a mi habitación.

—Adiós Jenny.

Tomé mi bolsa y salí por un lado de ella para ir a despedirme de Petter.

—¿A dónde tan guapa?

—Fiesta de Halloween ¿Tu no saldrás?

—Freddy está castigado y además no tengo ganas de salir.

—¿Por?

Se encogió de hombros.

—Mañana compraremos dulces—le di un ruidoso beso en la mejilla—. Adiós Petter.

Se despidió y yo salí de casa, aún era temprano y aunque Gael se ofreció a venir por mí no acepte, quería irme sola como siempre y aprovechar el tiempo para refrescar la mente, pero ese no era el problema si no el como regresar, mi orgullo no va a dejar que le hable a mamá así que probablemente pague un taxi.

Bueno, pero se han de preguntar ¿por qué llame a mi mamá por su nombre? Bueno en la mañana nuevamente peleamos, pero esta vez ninguna de las dos aguanto tanto así que gritamos aún más, lo bueno es que Petter estaba en la escuela y yo no fui porque estarían preparando todo para Halloween así que no habría clases y preferí quedarme en casita, nuestra pelea fue algo así:

Mamá: ¡Todo te tomas a pecho!

Yo: ¡Tu peleas por todo! Y esa no es vida por eso papá sigue de viaje para no aguantarte y como él no está desquitas tu coraje conmigo.

Mamá: Cállate tú no sabes nada.

Yo: Aquí todos sabemos que eres una loca histérica.

Mamá: Cuidado con lo que dices Dayana.

Yo: Ya estoy harta de ti, de tus enojos, de tus gritos, ¡De tu descontrol!

Mamá: Y que ¿Yo no puedo estar harta? Ya estoy harta de cuidar sola a dos hijos adolescentes y que uno de ellos sea toda una vividora que pelea por todo.

Yo: ¿Vividora yo? Yo me cuido por mi cuenta, lo único que haces es pagarme las cosas de la escuela y darme casa porque comida no ¿Te has dado cuenta que ya no cómo? No verdad.

Mamá: Dayana...

Yo: Eres una mala madre que no logra superar sus problemas y los paga con los que hay a su alrededor.

Y ahí fue cuando me soltó una cachetada y para evitarnos más problemas me encerré en mi habitación y solo escuche como ella se encerraba en el suyo, así que desde la mañana estuve encerrada en mi habitación por ende no comí más que el desayuno y con eso me refiero a un pan tostado con mermelada.

Y al llegar Petter fingimos ser la misma familia distanciada de siempre así que el no se dio cuenta de la pelea de la mañana.

Pero esta noche pensaba olvidarme de todo eso y disfrutar como si nada malo pasara.

¿Olvidándote o Amándote?Where stories live. Discover now