Respaldo | The Mandalorian

Capítulo 11

- ¿se quedarán más tiempo? - preguntó Omera inclinándose a mi lado

Estaba yo inclinada en el suelo junto a bebé mientras quita tomates de una maceta

- es un lugar tranquilo - respondí y la miré

- lo es, y pueden quedarse el tiempo que quieran - me sonrió y miré a bebé - por él, para que crezca rodeado de amigos

Miré a los otros niños de la aldea, corriendo y riendo mientras bebé sonríe

- éste lugar no es para mi Omera - dije bajo

- puede convertirse en su hogar - se puso de pue al igual que yo

Bebé caminó a los niños que se acercaron a ver los tomates que llevaba guardados en su canasto

- será un buen hogar - dije - pero no para mí

Esto de sentar cabeza en una aldea no es lo mío, mi vida y el significado de ella es el universo y navegando a través de galaxias, conociendo planetas con cosas que probablemente querrán asesinarme, cosechar y esperar el día de mi muerte no está en mis planes. Pero es perfecto para el bebé, crecerá fuera de peligros en un lugar donde se desarrollará rodeado de amigos y personas que pueden amarlo, no sólo yo, él necesita a una familia

El sonido de un disparo me alertó y miré a bebé, todos corrían, escuché a Mando llamar mi nombre a lo lejos y bebé corría hacia mí asustado.
Mis piernas temblaban y al mirar mi mano sobre mi estómago noté que estaba llena de sangre, mí sangre.

-¡Elina! - escuché a Mando

En un cerrar y abrir de ojos Mando me sostenía en sus brazos, ¿en qué momento llegué al suelo?

- ¡necesito ayuda! - gritó Mando a Omera

- ¿qué pasó? - miré a Mando - ¿qué sucede? ¿Por qué todos nos miran? - pregunté

- estarás bien, estarás bien - respondió

Miré su mano apoyada en mi abdomen evitando que la sangre siga brotando de mi cuerpo.

- bebé - susurré y cerré los ojos

- él está bien - dijo - por favor no cierres los ojos - dijo

Abrí los ojos y miré a mi lado, estaba bebé mirándome

- ¡no cierres los ojos Elina! - insistió Mando cuando volví a cerrar un poco los ojos, su voz sonaba demasiado preocupada e incluso sonaba quebrada

- él bebé puede - dije bajo

- ¿qué? - dijo

- el bebé - lo señalé

Mando giró a ver a bebé a nuestro lado sin soltarme, pude verlo levantar sus manos hacia mí, así que confié en él y cerré los ojos.

*****

*Narra Mando*

- ¿cómo está? - escuché la voz de Cara entrar a la habitación

- Omera dice que está estable, sólo está dormida - respondí

- necesita descansar

- ya lo sé - dije un tanto frustrado

La imagen de Elina caer al suelo después de que le disparara aquel cazarrecompensas no sale de mi cabeza.
Ella me importa, y mucho, la idea de perderla me aterra

- ¿dónde está el niño? - preguntó Cara después de un rato sin hablar

- afuera jugando con los niños, se recuperó mas rápido que Elina después de curarla

- ¿cómo fue posible eso? - preguntó

- ¿ella no te lo dijo? - respondí mirándola

- ¿decirme qué? - dijo

- no sabemos mucho acerca del origen del niño, sólo sabemos que puede mover cosas con la mente y curar heridas, jamás lo había visto sanar a alguien de un disparo - respondí mirando a Elina aún dormida

- ¿la amas? - preguntó y la miré

Regresé mi vista al frente sin responderle

- está bien, no me digas nada - suspiró - sólo te voy a pedir que la cuides, ella es especial y una chica fuerte, no le gusta hablar mucho de sus sentimientos pero ama que la amen y le muestren cariño y también le gusta que al dormir...

- sus pies queden descubiertos - la interrumpí - lo sé, me fijo en cada detalle - dije bajo

- también le gustas Mando - dijo

Y eso lo sabía, es pésima tratando de ocultarlo, la manera en que me mira y desvía la mirada cuando la veo, me encanta verla nerviosa y tan cerca de mi que me excita de sólo pensar en mis manos recorriendo su piel suave y su cabello largo color castaño. Me gusta, y mucho, pero no puedo estar con ella, el código me lo impide.

Me puse de pie y caminé a la salida de la habitación, salí de la casa y caminé a Omera cuidando de los niños en el jardín.

- necesito que me hagas un favor - le dije

- ¿qué sucede? - preguntó mirándome

- cuídala hasta que despierte - tomé aire - y dile que lo lamento

Di media vuelta y caminé a mi nave, abrí la puerta y subí

- ¿qué haces? - escuché a Cara

- sal de mi nave - caminé a mi silla y encendí el motor

- ¿a dónde crees que vas? ¿Enserio la dejarás sola? - dijo fuerte

- ¡no puedo estar cerca de ella! - grité y mi garganta comenzó a dolerme

Cara me miró un tanto molesta

- ¡si estoy con ella corre peligro y no quiero volver a tener este sentimiento de culpa si la vuelven a lastimar y no puedo hacer nada para ayudarla! - dije y tomé aire - no puedo estar con ella, el código...

- ¡a la mierda el código! ¡Mando, ella te quiere! - dijo - no seas un idiota y quédate con ella, no desaproveches ésta oportunidad por que ella lo vale todo

- ¡despertó! - llegó Omera corriendo a nosotros, la miramos - ella despertó

Ambos caminamos enseguida detrás de ella.

Necesito sentirla.