En un luminoso estudio de diseño, repleto de maniquíes vestidos con telas de vanguardia, Mariana ajustaba meticulosamente el dobladillo de un vestido esmeralda cuando Andrés irrumpió en la habitación. Sus pasos resonaban con la urgencia de noticias no dichas, y su mirada buscaba la de ella con una mezcla de ansiedad y entusiasmo.
"Mariana," comenzó Andrés, su voz trémula con una emoción contenida, "he recibido una llamada de la Milano Fashion Expo. Quieren que presentemos nuestra nueva colección en su evento principal. ¡Es la oportunidad que hemos estado esperando!"
Mariana dejó caer sus herramientas de costura y se volvió hacia él, sus ojos brillando con el reflejo de su sueño compartido. Sin embargo, una sombra de duda cruzó su expresión por un instante. "Es una gran oportunidad, Andrés, pero... con tan poco tiempo, necesitaríamos un milagro para estar listos."
Andrés se acercó, tomó sus manos entre las suyas, y con una sonrisa que irradiaba confianza, dijo, "Juntos, somos ese milagro, Mariana."
Apoyándose mutuamente con esa convicción, los siguientes días fueron un torbellino de actividad. Tejidos finamente seleccionados se convertían en arte bajo sus manos habilidosas. Cada noche, mientras el reloj marcaba las horas que los separaban de su gran debut, Andrés y Mariana compartían sueños y risas, recordando por qué habían empezado juntos este viaje.
Una tarde, mientras trabajaban hasta tarde, una discusión surgió sobre el diseño final de un vestido. La tensión creció, con el estrés de la inminente exposición haciéndose sentir.
"Mariana, ¡este vestido define quiénes somos como diseñadores! No podemos comprometernos en esto," exclamó Andrés, con la frustración clara en su voz.
Respirando profundamente, Mariana respondió, "Andrés, te amo y valoro tu pasión, pero debemos encontrar un balance. Nuestra esencia está en el equipo que formamos, no sólo en una pieza."
La tensión en el aire se disipó lentamente, las palabras de Mariana recordando a ambos lo esencial. Andrés, con su habitual sonrisa cálida resurgiendo, se acercó a ella y la abrazó. "Tienes razón, como siempre, mi amor. Hagámoslo a nuestra manera, juntos."
Así, con el amor y la colaboración guiándolos, dos días antes de la Milano Fashion Expo encontró a Andrés y Mariana observando su colección completa, una serie de obras de arte textil que no solo mostraban su habilidad, sino también su unidad.
El día de la exposición llegó.
-Viajaron y ya en la Milano fashion Expo-
Mientras presentaban cada pieza, los ojos de los espectadores no solo admiraban los diseños, sino también captaban la historia de amor y dedicación que cada uno llevaba cosido. Juntos, no solo conquistaron la pasarela, sino también reafirmaron su compromiso el uno con el otro, haciendo de su relación y su negocio un triunfo compartido.
Andrés y Mariana, dos reconocidos diseñadores de moda, se prepararon durante pocos días para presentar su colección en la pasarela del Milano Fashion Expo.
Con una combinación única de estilos, colores y texturas, crearon piezas que desafiaban las convenciones y deleitaban a la vista.
El ambiente estaba cargado de emoción y expectación mientras los asistentes esperaban ansiosamente a ver las creaciones de esta talentosa pareja.
Finalmente, las luces se atenuaron, la música empezó a sonar y los modelos comenzaron a desfilar en la pasarela, luciendo las prendas meticulosamente diseñadas por Andrés y Mariana.
Con cada paso, cada tela ondeando al viento, el público quedaba impresionado por la creatividad y la elegancia de las piezas presentadas. Al final del desfile, los diseñadores salieron a recibir una ovación de pie, sabiendo que habían dejado una marca imborrable en el Milano Fashion Expo.
Continuará...
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10 estrellas y subo otro capítulo -es gratis-
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Un amor de infancia
RandomSe trata de la dueña de una de las mejores empresas de ropa más exitosas de toda Latinoamérica llamada Mariana quien se enamora de su mejor amigo de la infancia al cual ya no ve desde ase muchos años el cual es hijo de un multimillonario llamado Ar...
