¿𝐔𝐧 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐬𝐞𝐧𝐭𝐢𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨? || 𝐏𝐡𝐨𝐞𝐛𝐞 𝐬𝐩𝐞𝐧𝐠𝐥𝐞𝐫 x 𝐀𝐦𝐛𝐞𝐫 V𝐞𝐧𝐤𝐦𝐚𝐧 ~

Capítulo 5

"¿𝑺𝒊𝒈𝒖𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝒆𝒍 𝒍𝒆𝒈𝒂𝒅𝒐, 𝒏𝒐?"

¡Amber's pov!
Cuando ya tenía al fantasma, abrí la caja en el techado, sin dejar de soltarlo.
Phoebe manejaba más a más lento, para evitar que perdiera el equilibrio.
Abrí la caja y lo obligué a entrar a la caja de protones y así fue. Atrape a mi primer fantasma.
Phoebe se paró y mi papá salió del auto para agarrarme, pero también Phoebe. Por las circunstancias obvia a Phoebe. Ella agarró mi cintura con delicadeza y me bajo poco a poco, estaba muy cerca de su hermosa cara.
Cuando me bajo, me seguía agarrando de la cintura.
– G-Gracias, Eve... — Dije sonriendo
Mi papá aclaró su garganta y lo vimos las dos.
Inmediatamente, al ver que estábamos así, nos soltamos y nos acomodamos el traje.
— Lo hiciste genial, berry... — Dijo Phoebe sonriendo con un pequeño rubor en las mejillas.
— ¿Berry? — Dije con una risita
— Es que tú me llamas Eve, y pues te llamas Amber, así que... — Dijo nerviosa.
— Me gusta, y más si me lo pusiste tú... — Dije acomodándole sus anteojos.
Ella se sonrojó por mi tacto y me reí.
— Sigo aquí, niñas — Dijo mi padre con los brazos cruzados y una ceja arriba.
— Ya lo sé, pa — Dije riéndome
— Debemos hablar, señorita... — Dijo mi padre serio.
— Creo que me debo de ir. Suerte... — Dijo Phoebe dándome palmadas en el hombro y al final, tímidamente un beso en la mejilla.
Cuando se fue, me toque esa mejilla, sonreí y me ruborice.
— Amber Venkman, hiciste muy mal en manejar siendo una menor de edad, y también en trabajar siendo una... — Dijo serio.
— ¿Trabajar? — Pregunté.
— Esto es un trabajo, Amber... — Dijo mi padre.
— ¡Este será mi nuevo trabajo! — Dije emocionada
— Eh... No. — Dijo mi papá riendo.
— ¡¿Por qué no?! — Dije enojada.
— Eres menor de edad, hija... — Dijo serio.
Suspire y cruze los brazos
— Entiéndelo... — Dijo
— Phoebe también lo es... — Respondí
Mi padre empezó a tartamudear y decir cosas cortadas.
— Es diferente... — Dijo
— Si claro... — Respondí
Me subí a la camioneta y mi papá se quedó callado en el camino a casa.
Cuando llegamos, antes de bajarme del coche, él le puso seguro a la puerta, suspiró.
— Se que a tu madre le hubiera gustado que vivieras nuevas experiencias, y no quiero hacer las cosas mal, Amber... — Dijo.
— Puedes ser una cazafantasmas... — Admitió.
Grite de la emoción
— Siempre y cuando, estés con Phoebe... — Dijo serio y riendo.
Yo rodeé los ojos con una sonrisa y asentí.
Ma baje del coche y mi papá agarró mi mano.
— No le digas nada de esto a tu hermano... — Dijo
— Está bien... — Respondí
Cuando llegamos me dolían las piernas y estaba emocionada, me tire en la cama y sonreí. Se sentía increíble.
Pero, un pensamiento vagabundo andaba por mi cabeza. Phoebe...
Ella era increíble, siempre me apoya en mis locuras y empiezo a sentir algo raro cuando estoy con ella...
Es como si tuviera mariposas en mi estómago y como si la garganta no me quisiera ayudar, y me mete un puño en ella que atora mis palabras.
Es muy hermosa, no lo niego... Espera un segundo, ¿Por qué me preocupo?
No me importa para nada lo que piense la gente de mi, pero, ¿Por qué la opinión de Phoebe si me importa?...
Mi padre entro a la habitación y me llevo unos papeles.
— Toma hija, son cartas que me hacía tú madre... — Dijo
— Cuídalas mucho, tienen un gran valor sentimental para mí. Además, pienso que también debes de tener cosas de ella... — Añadió
Yo las agarre y las deje a un lado. Me acurruqué y mire a la ventana.
Mi padre lo noto y me agarró del brazo, haciendo que dirigiera mi vista hacia el.
— ¿Qué pasa, hija? — Preguntó
— Nada, pa... — Dije
— Cuando tienes algo, no haces contacto visual con nadie y solo miras fijamente a una luz tan brillante que ilumine tus pensamientos que no logras resolver... — Explicó. Me sorprendí mucho por su respuesta. Me conocía mejor de lo que yo a mi.
— Está bien... Si me pasa algo... — Dije
Suspire y me senté al lado de él
— Estoy sintiendo mariposas en el estómago y se me hace un nudo a la garganta. Es una persona increíblemente hermosa, brillante, inteligente, divertida, sarcástica... — Dije, mientras se me iba formando una sonrisa involuntaria.
— Es amor, hija... — Dijo mi padre en seco.
Me sonroje mucho. Digo, no podía estar enamorada de Phoebe...
— Ya se que es de Phoebe... — Dijo mi padre.
— ¡N-No e-Es cierto! — tartamudee
— Hija, tú piensas que no te conozco... Pero, te conozco más de lo que crees... — Dijo mi padre señalando mi boca
— Tu madre se negaba a amarme, ocultaba sus pensamientos e ideas bajo un "no siento nada" — Dijo mi padre
— Además, ya te han gustado otras chicas... — Añadió
— Si, pero... Nunca había sentido algo tan fuerte como lo siento cuando estoy con ella... — Dije
— Pues entonces, ese amor es más que solo un simple estás guapa, es un enamoramiento... — Dijo con una sonrisa
— Ella jamás me correspondería... — Dije desilusionada...
— Pues, ella no ha tenido novios... Amber, ella a lo
Mejor no sabe que es bi o no... — Dijo
— ¡Y si no lo es, quedaré como una pendeja! — Dije frustrada y agarrando mi cabello.
— Solo sigue a tu corazón, mi amor... — Dijo mi padre, para después pararse e irse.
Me quede acostada, mirando al techo.
— Creo que... — Dije
— No es una locura... — Añadí
— Ella es tu amiga, la única que tienes ahora mismo, no te puede gustar porque lo echarías a perder... — Dije
Cerré mis ojos y los abrí
— Creo que... — Dije
— ¡Me gusta Phoebe Spengler! — Grité
Me tape rápido la boca y mi hermanito, paso por la puerta.
— ¡Sabía que te gustaba! — Dijo Greg
— Era muy obvio, Amber... — Añadió
— Dejen de decirme ¡eso! — Grité
Saqué a Greg del cuarto y cerré con seguro.

¡Phoebe's pov!
Después de irme y cuando regrese a casa, mi madre me esperaba con una canasta de ropa.
— Hora de lavar, Phoebe — Dijo y me la dio.
— ¿Por qué no nos dijiste que había un fantasma? — Me preguntó bajando las escaleras conmigo
— No lo creí necesario... Ahí estaba Amber y el Sr.Venkman... — Dije irritada
— Ellos no son tu familia, Phoebe... — Dijo mi madre metiendo el shampoo.
— No voy a discutir contigo. — Dije metiendo la ropa, para después irme
— ¡Phoebe! — Grito mi madre, pero yo no conteste
Me subí al cuarto y ahí estaba Trevor con su traje y parecía intentar cazar un fantasma.
— ¿Se te perdió algo? — Pregunté.
Él estaba con su cabeza abajo de la cama y al levantarla se pegó.
— ¡Auch! Creo que había un fantasma... — Dijo
— Hace bastante que no hay muchos, Trevor... — Respondí y lo saqué.