veintiséis

1.7K 245 7
                                    

Una semana y poco más después de la fiesta, seguíamos con nuestra vida normal. Llevaba varios días sin verte, pero estábamos con exámenes finales y estaba realmente ocupada. Me había quedado dormida en mi escritorio, tratando de estudiar Historia. Me desperté por el sonido de mi móvil. Contesté sin siquiera mirar, y una voz algo seca y seria me avisó de que Maia estaba en el hospital.

Con sus tan sólo ocho años de edad, mi hermana pequeña había tenido numerosos ataques graves de asma. Ese fue de los más graves que ha tenido hasta ahora.

Es realmente grande la preocupación que se siente al perder -o estar a punto de ello- a un ser al que amas. Ahora más que nunca lo sé, ¿no crees, Lukey?

Memories ; lhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora