Mi amiga tiene un harem ¿Y yo qué?

Capítulo 21: Yo soy el peligro.

En la siguiente noche me levanté, porque una de mis plantas me transmitió peligro, algo se acerca. Salí de la casa lentamente para adentrarme en el bosque.

Estaba oscuro pero la luna era grande en este lugar, podía ver muy bien.

Mientras que caminaba entre las sombras de los árboles note una extraña huella...

Me asuste cuando alguien tocó mi brazo.

-!!-casi grite pero ví quién era y suspiré aliviada.

Era Azael en su forma mitad humano y serpiente, su cola de serpiente si que es larga, con la luz de la luna hacía ver sus escamas como si fuera obsidiana brillante. Seguía siendo hermoso como siempre, con rostro juvenil llegando a la madurez.

-¿Qué haces en el bosque sola?-el me miró preocupado.-Es peligroso.

-Hola tanto tiempo...-ni siquiera saludo, simplemente dijo que era peligroso.-Estoy bien... Solo salí a caminar.-menti dándole una sonrisa tierna para que se calme.

-Vamos.-el quizo cargarme pero lo impedi.

-Yo sé cómo ir.-le respondí y el me siguió por detrás.

Notaba sus obvios ojos mirando por todos lados a mi alrededor, como si estuviera preparado para cualquier peligro y saltar a el así no salgo herida.

Temía que se tomara muy en serio el querer dar su vida por mi.

-Llegaste antes que los demás?-le dije al verlo solo.

-Estan aguardando en un lugar para emboscar.-respondió serio.

Era buena idea mantener atrás pero cerca un pequeño ejército, atacar por detrás sería algo impredecible y desorganizaria a los demás.

Sigo pensando que jugar muchos videojuegos de estrategia sirvió, a como extraño ello...

-Eso significa que sabes más de estos humanos...-esquive una planta que sabía que es venenosa al roce de la piel.

El miró ello extrañado pero respondió.

-Están marchando unos cien humanos con muchos hombres bestia.

-Avanzan rápido?

El asintio.

-Van con algunos hombres bestia caballo estos están siendo usados para cargar sus cosas, eran bastante grandes.

Me detuve sorprendida.

-Eso no es bueno...-estaba en verdad preocupada.-Tenemos que cambiar de planes entonces.

Caminé más rápido y el me siguió.

-Que significa lo que dices?-el me detuvo, ví que le contagie mi preocupación.

-Azael... Puede que tengan más armas peligrosas en sus manos, creo que debemos hacer esa emboscada antes de que lleguen aquí, no, definitivamente no podemos dejar que lleguen.

Si tenían armas de gran calibre sería sumamente peligroso, eran pocos comparados con la cantidad de tigres, pero si son pocos y con armas letales podrían fácilmente matar a todos los hombres bestia.

-A cuántos días están?-ya estábamos llegando a la tribu.

-Al paso que van estimo que unos seis días.

Suspiré cansada, debía prepararme mucho y también a los hombres tigres.

-Seran unos días agotadores.

Azael parecía comprender así que asintio.

-Ire a descansar...-dije al verlo que me seguía.-Nos vemos mañana.