UN LUGAR EN EL BOSQUE

capitulo III(version2.0, miedos)

como dije este capitulo es un borrador que tengo el cual si les gusta lo implementare en la historia.

Habíamos pasado 2 semanas desde que realizamos la extraccion pulmonar del señor Carlos. podia decir que me senti mejor con el tiempo pero el hecho de cortar a otro ser humano verlo sangrar tratarlo, creo que el miedo que tube no fue por lo que hice sino por el miedo de lo que pude hacer fallar.

Pensé y seguí pensando el porque de mi miedo a fallar, no sabia que era, talvez era remordimiento si el paciente moría, era miedo a lo que pensara la familia o lo que le pasaría, odio a mi mismo  por fallar, tenia miedo de estas circunstancias cada paso que daba por los pasillos generaba gran terror en mi cuerpo por lo que podria pasar si no me concentraba, si me alteraba, todo fue tan agobiante que mi vista se nublo y finalmente vi como jhon se acercaba s mi, todo lo que vi después fue oscuridad. Me desperté enl  a habitación de un hospital, no me altere suponiendo que fue jhon quien me trajo, pensar que me desmayaría por pensar demasiado.. que ironía jaja... reí y reí como un loco, fue una risa larga y llena de estasis, me reí incontroladamente reí hasta llorar, se supone que estoy estudiando medicina ya en pocas semanas me graduaría y aquí me hallaba postrado en una cama de hospital riendo y llorando como un psicópata, me hervía la sangre por esto yo una persona que lo tiene todo se halla aquí con gran remordimiento y temor por algo que aun no a pasado, patético de mi parte. como yo no 'podía afrontar algo aparente mente simple, no podía evitar compararme con un ase**no primerizo, alguien que tiene un cargo de conciencia tan grande que podía llegar a suicidar**se, talvez por eso algunos médicos se deprimen, pero como el asesino con el tiempo pueden afrontar esta culpa y seguir. Era curiosa esta similitud, con mi  monologo interno conseguí calmarme un poco, me quite el catete y vi correr el cálido liquido rojo oscuro  por mi clara piel sin inmutarme mientras contemplaba su belleza observe la carrera de la sangre hasta convertirse de un pequeño arroyo en una simple gota que cayo rápidamente al suelo era algo complicado  pensar que este liquido era uno de los que permitía nuestra vida. Camine por los pasillos desolados del hospital las luces incandescentes mareaban mi cabeza a cada paso y tras de mi el rastro sangriento, cada avance fue ligero como si mi cuerpo  ahora flácido lo llevase el viento, salí del hospital y vague sin rumbo alguno pude parecer un loco para cualquiera con una simple bata de hospital y un par de sandalias que encontré, de repente me halle  en medio de una avenida el resonar de los autos, el ruido y las luces fue el golpe final para mi mente, no pude evitar sentirme como un ciervo viendo la luz, hoy voces mas alto de lo normal y por un momento creí escuchar mi nombre pero cuando me volví asía el sonido me ayee frente a un camión, el sonido del claxon fue estruendosamente fuerte y cuando creí que estaba sobre mi, me halaron del brazo lo suficientemente fuerte y rápido para arrebatarme de las gélidas garras de la muerte y a su vez asiéndome entrar en razón, pero, cuando me voltee para hallar a mi salvador fui recibido por la vista de una mano dirigiéndose con gran ímpetu hacia mi mejilla izquierda no sabia si fue mi debilidad o la sorpresa lo que produje que me tambalease asía atrás por la fuerza del golpe.

Posteriormente a esto hoy los suaves sollozos de una mujer la cual anteriormente me había abofeteado ahora estaba llorando en mi pecho mientras me daba ligeros golpes me tomo un tiempo saber quien era pero con un examen minucioso de su apariencia y manera de actuar me di cuenta de que se  trataba de Karla, su sedoso y largo cabello negro asía de cortina para su bello rostro generalmente alegre, u piel de un blanco inmaculado ahora parecía un tanto pálida por la angustia que supuse paso por mi no pude evitar sentirme mal yo como un gran tonto termine en el hospital por pensar demasiado las cosas y casi muero por estar perdido en mi inconciencia, la única manera que halle de consolarla fue dándole suaves palmadita es la espalda con mi mano izquierda mientras le acariciaba la cabeza con la derecha, pude divisar a no muchos metros de donde  nos hallábamos a mis dos amigos los cuales me veían con rostros llenos de preocupación pero también pude distinguir un ligero brillo vengativo como si estuviesen por realizar el golpe final contra su mayor enemigo no pude evitar enviarles una ligera sonrisa buscando ablandar así fuese un poco sus corazones...

(Estamos cerca del final del borrador espero con ansias sus comentarios)