Obagiyuu One shots~

"Confesión"

Giyuu estaba confundido.

Tenía a Obanai frente a él con la cara más roja que la mitad de su haori, y simplemente no le quería decir que ocurría.

Tiempo antes, con el paso del tiempo estos dos habían formado algún tipo de "amistad" con el pasar de los meses de conocerse, aún que fue algo complicado para Iguro ya que Tomioka es una persona de pocas palabras.

Sin embargo nunca lo había visto así, quizás estaba enfermo y por eso parecía que su rostro estallaría en cualquier momento.

-Obanai... ¿Todo bien? -Pregunto confundido el azabache más alto, mientras con una mano la ponía en su hombro para ver su su amigo reaccionaba.

El más bajo se tensó al sentir ese tacto fue traído de inmediato volvió a la realidad. -Esto... Yo... -No encontraba las palabras correctas para decirlo sin sonar raro, pero era ahora o nunca. -Maldita sea... -Dijo en un susurro bajo. -Veamonos después. En el lago frente al restaurante que siempre vamos.

¿Solo eso era? ¿Entonces por qué le costo tanto decirlo? -Eh... Si claro, ¿A qué hora?

-A las 8, al atarceder.

-Claro. -Tras esto ambos se despidieron y fueron cada uno en su dirección.

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Tomioka iba camino al lugar correspondiente, iba 10 minutos antes ya que sabía que Obanai odiaba que siempre llegara tarde a cualquier lugar.

En cuanto llegó visualizo al mencionado dando vueltas en círculos y haciendo movimientos con sus manos, quien en cuanto lo vió se quedó quieto y su rostro había vuelto al color rojizo de antes.

-¿Desde cuando llegas tan temprano? -Quería parecer lo más tranquilo posible así que actuó como si fuera una ocasión común y corriente.

-Se que no te gusta que me tarde. -Respondio mientras se acercaba a él. -¿Para qué me querías aquí?

Luego de preguntar, Iguro se dió la vuelta y levantó del suelo un ramo de orquídeas azules, flores cuales convinaban con los ojos de Tomioka.

Este mismo se mostró algo confundido ante esto. Varias veces Obanai le había obsequiado detalles, pero nunca flores. Antes de poder preguntar algo el contrario comenzo a hablar.

-Giyuu. -Tras esto hizo una pausa para tomar aire y prepararse. -se que es algo repentino esto, pero creo que ya es hora de que lo sepas. Desde el comienzo de nuestra amistad he estado desarrollando extraños sentimientos hacía tí, al principio lo negaba, pero ahora me he dado cuenta que no es algo que va a desaparecer ya que con el paso del tiempo a crecido más y más, más de lo que yo podría imaginar. A donde quiero llegar con esto es que me gustas, estoy enamorado de tí. Se que quizás te sea difícil de creer pero así es, estoy completamente seguro de lo que siento y no quiero que te lo cuestiones porque se que lo harás, ya que me di el tiempo de cada vez que estamos juntos prestar atención a cada cosa que te gusta y disgusta, se que tienes muchas inseguridades como para dudar de si realmente alguien sería capaz de amarte, pero como vez aquí estoy, como un tonto enamorado diciendote todo esto. No te quiero presionar a nada, ya que soy capaz de esperarte hasta el fin del mundo y mucho más. Te amo, amo cada uno de lo que tú ves como defectos y cada una de tus cualidades, amo tu personalidad y tu forma de ser. Así que aquí mismo, en el lugar donde nos vimos por primera vez antes de ser pilares, te pido que me des una oportunidad de ser esa persona que este siempre ahí para tí, quiero ser esa persona quien ames y amarte de la misma manera, Giyuu, ¿Me concederías el privilegio de ser tú novio?

Luego de decir todo esto extendió el ramo, y con la otra mano agarro la de Tomioka. Quien era él ahora quien estaba completamente rojo y atónito.

-¿E-en serio recuerdas que fue aquí que not conocimos? Cruzamos una vez miradas. -Fue lo único que logró salir de su boca, mientras pequeñas lágrimas se juntaban en sus ojos amenazando con salir.

-Unos ojos como los tuyos son imposibles de olvidar.

Giyuu sonrió ante esto y tomó el ramo ofrecido. -Yo también te amo, Obanai. -Aún con la mano del más bajo agarrada, las extendió hacía la mejilla de este para unir sus labios, siendo correspondido de inmediato.

En cuanto cerro los ojos las lágrimas cayeron por su rostro, pero eso no importa, este era el momento más feliz de su vida. Sentir como los labios de Obanai y los suyos parecían haber estado hechos uno para el otro, mientras se movían de forma lenta, dulce y mágica.

Luego de separarse Obanai sin palabra alguno tomo más fuerte de la mano de Tomioka y lo llevó hacía algún lado.

Mientras iban caminando Giyuu notaba como a lo lejos estaba un pequeño puente al cual ellos dos recurrentemente iban para pescar o mojarse los pies.

Al llegar al puente este noto como tenía un camino de velas, las cuales llegaban hasta el final del lugar. Por su mente paso como fue que las acomodo, ya que las tablas del lugar estaban medias inclinadas.

Obanai empezó a caminar más lento mientras caminaban por las tablas sobre el agua cristalina la cual estaba mezclada a unos colores rojizos y morados gracias al atarceder.

-Una vez me contaste lo mucho que te gustan los atarcederes, y ese mismo día también me dijiste que amas ver el agua calmado, ¿no es así? -Menciono Iguro mientras tomaba asiento ya en el final del camino, dejando sus pies caer sobre el agua.

-Lo recuerdas mejor que yo. -Respondio imitando la acción del contrario. -El atardecer reflejado en el mar es hermoso, ¿no crees? -Pregunto mientras observaba fijamente con un leve brillo en sus ojos junto a un carmín en sus mejillas, acompañados de una pequeña sonrisa.

Obanai volteó a verlo y tardo unos segundos en contestar mientras admiraba la belleza de Giyuu. -Es lo más hermoso que he visto. -Tras esto dejo caer su cabeza sobre el hombro del más alto, acción que fue imitada por el otro poniendo su cabeza sobre la de Obanai, junto a Kaburamaru en el cuello de ambos con sus manos unidas.

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-Dame lo que me debes más un pago extra.

-¿¡Ah!? ¿¡Por qué te tendría que dar algo extra!?

-¿¡Sabes lo jodidamente complicado que fue poner tus putas velas en el jodido puente!? ¡Se me cayeron como 5 y tuve que comprar más! -Al día siguiente, un estresado peliblanco con cicatrices estaba exigiendo a Obanai su recompensa por haber ayudado en su "asquerosa y cursi" declaración. (o al menos así lo llamaba él)

-Por Dios Shinazugawa, que tú seas tan bruto no es mi culpa.

-¡Ese puente es más inestable que mi estado mental!

-Eres un jodido imbecil, ¿sabias? -Obanai saco el dinero acordado más el extra pedido.

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Pues, estaba pensando en como seguir con el otro fic Obagiyuu, (Q por cierto, si no lo han leído esta en mi perfil como "Cara de rata" vayan a leerlo (0 promoción)) y se me ocurrió esto, así que pues aquí esta. HAHSHS

Pensaba subirlo como un One-shot hasta que me acorde de esto. XD

Eso es todo, chaitoo.