Capítulo 5: Cazarrecompensas

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-PoV Ben-

Abrí mis ojos, esperando nuevamente despertar junto a Delta, pero grande fué mi sorpresa al despertarme en una llanura.

-¿Donde....estoy? - pregunté cuando una voz me llamó desde atrás.

-¿Ben? - una voz fatigada me habló.

Dí la vuelta para observar de quién se trataba y para mi sorpresa se trataba de Flare, sin embargo, esta tenía heridas en todo su cuerpo.

- ¡FLARE! - de inmediato fuí a socorrerla pero solo la atravesé como si fuese un fantasma -¿Que? -

- Ben....¿Eres tú? - la voz de Gwen hizo que dirigiese mi mirada hacia ella.

Ella contaba con moretones en su cuerpo, junto a ella iba el Abuelo Max,se veía agotado, con heridas en su cuerpo y vistiendo un traje extraño.

Unos pasos detrás de mí me hicieron sentir escalofríos.

Giré mi vista y lo que ví me sorprendió.

Era yo, vestido con un abrigo largo con capucha con cruces  de color dorado bordadas en las zonas largas del abrigo, vestía pantalones blancos y botas blancas, ademas de guantes blancos.

Ignorando mi vestimenta, toda mi apariencia había cambiado, mi cabello castaño se había vuelto de un color blanco como la nieve, mis ojos se habían vuelto dorados y mi piel era mucho más pálida, además de eso, era mucho más alto, casi como si fuese un adolescente.

Pero mi expresión, mi expresión era fría como el hielo, no había rastro de emoción alguna, solo una expresión de frialdad e indiferencia.

Llevaba en mis manos una espada, esta era un tanto diferente, la hoja de la espada era de un intenso color blanco además de que el filo era de un color dorado, la empuñadura de la espada era de un color dorado como el oro y tenía forma de una cruz.

Detrás de mi otro yo había una especie de nave extraterrestre completamente destruida y que estaba incendiandose.

Mi otro yo dió un paso, luego otro, su expresión fría atemorizaba tanto a Flare como al Abuelo Max y a Gwen.

Ben.

El se detuvo y dió la vuelta solo para mirar a quién era el origen de esa voz.

- Delta...- dije con preocupación.

Ella estaba ahí, posando con una armadura que consistía en una pechera de color blanco con detalles en color dorado, guanteletes blancos  y una especie de falda hecha de metal blanco.

Supongo que no me escucharás.

Mi otro yo hizo aparecer dos alas blancas en su espalda y una aureola dorada sobre su cabeza.

Supongo que será a las malas.

Delta dijo con una sonrisa mientras extendía sus alas y una aureola dorada aparecía sobre su cabeza.

¿No dirás algo?

Mi otro yo no respondió.

Delta solo suspiró mientras que en un destello dorado una enorme guadaña blanca y dorada apareció en su mano.

Ben 10: Love and AngelsWhere stories live. Discover now