TODO +18! 🥵

Trío grabado (MHM)

— ¿Qué ha pasado aquí?

Oh no.

Nos han pillado a los dos desnudos.

— ¿Estáis follando tan tranquilamente en mi casa?

— Lucía..—dijo el jefe.

La que se llamaba Lucía sacó el teléfono y lo puso en orizontal, sostenido por un paquete de pañuelos. En la pantalla se veía una cámara. Le dió al botón rojo.

— Callate, Jonh. Quiero... Hace tiempo que no tengo relaciones sexuales, mucho menos tríos.

— P-pero, somos amigos.

— Solo será sexo.

¿Qué estaba pasando aquí? ¿Un trío?

Bien.

Se quitó la ropa. Vino hacia nosotros. La polla del jefe se puso en pino de nuevo.

A este hombre le encantaba follar.

— Vamos a mamarla entre las dos, bonita. —me dijo la que se llamaba Lucía.— Tengo vibradores y juguetes en una caja, para luego. También condones, llevan ahí siglos.

Yo no podía quedarme embarazada. Si lo hacía con o sin no importaba. Pero prefería que fuera a piel, me gustaba sentir el semen.

— No sé si mi pene va a aguantar tantas corridas sin bajarse. —dijo Jonh.

— Aguantará, te he visto en tu habitación masturbándote mientras veías videos inapropiados. Te corrías mil veces.

Jonh se sonrojó, era obvio que no esperaba aquello.

A mí me hacía feliz saber que iba a tener alimento durante bastante rato.

Lucia y yo empezamos a chuparla, una a un lado y otra a otro. Lucia bajo hasta los pelos que tenía al final de su pene, yo fui a la punta. La besé y la lamí. Lucia hacía lo mismo con la parte baja.

— Oh~ —gemia el jefe. — Dios, nunca había tenido a dos tetonas chupándomela. Me siento..—otro gemido, más alto aún.— siento que me vendré de nuevo.

Le tapé la punta de la polla. Se estremeció. Gimió muy alto.

Lucia se fue y regresó con todos los juguetes en una caja. Sacó un vibrador enorme. Eso no cabría dentro de mi.

Se arrodilló al lado mía. Sin previo aviso el líquido pegajoso nos salpicó en los pechos a ambas. Estábamos empapadas.

Alcé la vista y vi a Jonh tumbado con la mano en el pene. Se tomaría un descanso.

Me acerqué a lamer el semen que había caído en los pechos de Lucía. Note su puño cerrado rozando mi culo.

Espera.

¿Cerrado?

Algo se penetró en mi vagina. Algo grande y vibrante. Saqué la lengua y miré hacia arriba. Lucía hizo lo mismo que yo pensaba hacer con ella. Lamió mi teta, se metió el pezón en la boca como si fuera un biberón y siguió lamiendo. Metió sus largos dedos en mi ano.

Dios Dios Dios...

Luego me besó. Sabía a semen. Reclamó mis labios y los mordió. Metió tres dedos ahora dentro de mi.

Al cabo de un rato Jonh se despertó. ¿Estaba dormido? Normal, vaya mamadas le hicimos.

— Mujeres, incluidme en el placer.

Lucia me soltó, con una sonrisa brillante. Me dió la mano y me llevó al sofá, me temblaban las piernas por el vibrador que tenía metido, no en el ano, si no en toda la vagina.

Me tumbe y tardo poco o nada en ponerme la suya en la cara. Lamí como si fuera chocolate derretido. Lucia gimió fuerte. El jefe me metió más el vibrador por la vagina mientras él chupaba el semen de las tetas de Lucía.

Lucia sabía muy bien, enseguida cayó más fluido. Se había venido. Me lo llevé todo a la boca. Yo también me vine.

Jonh fue a parar el vídeo.

Es verdad, estábamos grabando.

Me daba igual, me sacaron el vibrador. Estaba agotada. Lucia me dijo que podía quedarme, hoy me lo merecía.