You would look beautiful.

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Me caí de la cama e hice una mueca de dolor, despertándome al instante.

—¡Mierda! — me levanté.

Al ponerme de pie, me encontré con Enid y Merlina mirándome con decepción.

—¿Qué quieren? — pregunté.

—Vamos a irnos de compras. — espetó En.

—Lastimosamente. — agregó Addams.

—¿Por?

—Por favor, necesita un atuendo para el baile, ¿no es así? — cuestionó mi hermana.

—Por favor, necesita un atuendo para el baile, ¿no es así? — cuestionó mi hermana

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Fuimos hasta Jericó. Mis ganas de estrangular a la pelinegra se habían vuelto más frecuentes que nunca. Dos cosas; Primero, ella me había despertado de mi siesta. Segundo, por su culpa estamos frente a una tienda para comprar un vestido.

—¿Qué clase de infierno terrorífico es este? — comentó la de trenzas.

—Piensen positivas, chicas. Es nuestra primera sesión de compras las tres. Ignoremos que el baile sugirió ir de blanco para hacer juego con el tema, pero eso no nos va a nosotras. — dije, dibujando una sonrisa en mi rostro al terminar.

—No se si te olvidaste, pero tenemos asuntos más importantes que comprar ropa para un baile en el que ni siquiera deseo asistir. — murmuró la más baja.

—¿Qué dijiste? — preguntó Enid.

—No es de tu interés. — criticó Addams.

Suspiré y sentí como Merlina tomó mi brazo, sacándome de ahí inmediatamente.

—Ten algunos límites con mi hermana, Addams. — apreté mis puños mientras caminábamos.

—Es tan insoportable como tú. — espetó, menospreciándola.

—Voy a matarte. — fruncí el ceño.

Divisé como Dedos salía de su mochila, poniéndose en el hombro de la gótica y señalando la vidriera de un local random.

Me di la vuelta y mis ojos se iluminaron igual que los de Pequitas. Un vestido negro junto con uno amarillo estaban en exhibición. Ambos eran... Especiales.

Nos quedamos unos segundos mirándolos, pero interrumpió la persona menos esperada. La psicóloga Kinbott había salido de la tienda.

—Hola chicas. — saludó.

Quería evitar hablar con ella. Sinceramente, no me caía tan bien como antes.

—Ammm, hola, y adiós. — sonreí y me fui.

Al alejarme varios metros de ellas, apoyé mi cuerpo en una pared y me emergí en mis pensamientos.

Tenía miedo, ¿por qué? Bien, no tenía pareja para el baile. Muchos dirían, "no vayas", y créanme, no iría, pero tengo el presentimiento que algo va a pasar. Aparte, rezaría por ver a Merlina con un vestido, y más si es el oscuro que vimos hace rato.

¿Why?Where stories live. Discover now