XXI

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(...)

La tercera prueba del Torneo había llegado a Hogwarts luego de dos meses desde la anterior. Harry estaba entusiasmado, mas también asustado. Estaba entre los primeros, en un empate con Cedric Diggory, al cual no le ha vuelto a hablar desde hace seis meses más que para lo justo y necesario.

Draco también estaba algo nervioso por lo que podría suceder si estaban ellos dos allí al mismo tiempo. Pero decidió ignorar por el momento ese pensamiento, ya que no valía la pena generar una paranoia innecesaria.

-¿Estás bien? -preguntó el azabache hacia el ojiazul-

-Sí, supongo -respondió-. No lo sé, estoy preocupado por nuestra seguridad. ¿No podemos decirle al Ministro que tú no quieres participar o finges que te sucedió algo?

-Draco, entiendo que estés angustiado. Pero no va a suceder nada, te lo aseguro.

-No quiero que nos pase nada, en serio.

-Y no nos va a suceder nada. Ellos no van a hacernos nada. No están aquí.

-¿Y si sí? Tengo miedo, Harry. Por favor, trata de no competir.

-No podemos hacer nada a este punto... -dijo-Además, me tienes a mí, con mi súper "Suerte Potter".

El rubio rio.

-Espero que tu suerte nos acompañe. La mía no es de fiar.

-Tranquilo -repitió-. ¿Nos vamos?

-Vamos. -terminó con una sonrisa-

Llegaron al lugar de la prueba, donde los esperaban todos los estudiantes junto a los profesores y el Ministro.

Draco se sentó junto a Blaise y Pansy.

-Hola, huroncito. ¿Qué tal? -habló la castaña-

-Preocupado, pero estoy bien, supongo.

-¿Seguro?

-Sí, Pans. Seguro.

-Bien.

Dumbledore indicó que los primeros en entrar al laberinto en busca del Trofeo de los Tres Magos eran Cedric Diggory y Harry Potter, seguidos de Viktor Krum y de última Fleur Delacour.

Los primeros entraron en distintas partes del laberinto, cerrando este su salida de vuelta hacia el exterior.

Harry se sentía igual que Draco, pero él decidió ocultarlo por el bienestar mental del rubio. Sabía que él no estaba bien, y no quería fomentar aún más ese malestar con la preocupación mutua y otras teorías que Draco todavía no había pensado.

Decidió nublar su mente con otras cosas para que no le ganaran los pensamientos intrusivos. No debía distraerse estando en una situación así.

Empezó a correr tallando un camino que no sabía a dónde lo dirigiría, hasta que escuchó un grito de una mujer. Era de Fleur.

-¡Delacour! ¡¿Estás bien?! -gritó, intentando que esta la escuchara-

Oyó un grito casi inaudible a su izquierda, así que se dirigió para ese lugar.

Sólo es un Juego [Drarry/Harco]जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें